Denuncia que les echaron de un bar porque sus hijos estaban tocando el tambor: «Son unos sinvergüenzas»

Es el caso, por ejemplo, de la última publicación compartida por el influencer valenciano Jesús Soriano, más conocido como @soycamarero, sus redes sociales. El también trabajador de la hostelería relata el episodio de un cliente que dejó una mala reseña en un restaurante después de que sus empleados les echaran porque sus niños estaban tocando el tambor.

Alude, en primer lugar, que se encontraban celebrando la Semana Santa y, además, en el bar había música y mucho ruido de la gente. «Lamentable el trato de los dueños, son unos sinvergüenzas», critica en su post en el perfil de Google del restaurante.

Lejos de amilanarse y obviar lo sucedido, el gerente del mismo local le contesta dando su versión sobre lo que ocurrió esta semana. «Estimado cliente, después de una hora consecutiva con el ruido de tres niños tocando tambores en el interior e innumerables quejas del resto de clientes tanto al staff como a ustedes directamente, les pedimos educadamente y sin falta de respeto que por favor pararan, obteniendo como única respuesta el incentivo de los padres a los niños para que siguieran tocando además con más intensidad», recuerda.

«Acto seguido -continúa- obtuvieron quejas directas de más clientes y ustedes respondieron con insultos que hemos decidido obviar y no reproducir», explica el propietario del bar, señalando por último que «los niños son siempre bienvenidos siempre y cuando vengan acompañados de adultos con educación» y que «la tamborada se celebra durante la noche del Sábado de Gloria en Hellín y no en Quebranto Almagro».

Como era de esperar, el post se ha vuelto viral en pocas horas y la legión de seguidores de 'Soy Camarero' se han organizado para opinar al respecto. «El incivismo de los niños refleja la mala educación de los padre» o «mi hijo es responsabilidad mía y de su madre. Ya nos encargamos nosotros de que no moleste. Aunque hay muchos padres que los sueltan en los restaurantes como si fuera un chikipark», son algunos de los más destacados.