El fallo considera probado que Leia, una perra de la raza Gran Danés, propiedad de la pareja, murió como consecuencia de la desnutrición que presentaba. En concreto, el animal falleció por una «torsión gástrica debido a una inadecuada alimentación», de acuerdo con el resultado de la autopsia.
Según denunciaron la asociación Abogados Valencianos en Defensa Animal (Avada) y el partido Portodos, que han ejercicio la acusación particular en la causa, los condenados tuvieron durante años a la perra atada en una terraza de su vivienda en la localidad de Albalat de la Ribera.
Los dueños de la perra apenas le daban comida y le colocaron un collar de descargas eléctricas para que no ladrara cuando se quejaba de una rotura de pleura que había sufrido. Pese a su evidente mal estado de salud, del que alertaron los vecinos de la pareja, sólo llevaron a la perra en una ocasión al veterinario en seis años, según las acusaciones.
En el juicio celebrado este miércoles en Valencia, se dictó la sentencia por conformidad que impone al matrimonio un año de cárcel, según adelantó el diario Levante-EMV. La pena de prisión quedará en suspenso ya que los procesados, que deberán realizar un curso de reeducación en materia de protección animal, no tienen antecedentes.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete