Los agricultores ven «populista» la medida de Yolanda Díaz: «No va a 'topar' los precios, va a embestir al sector»

Con incredulidad han reaccionado en el campo, ante esta idea: «¿No se ha enterado de que su Gobierno aprobó una Ley de Cadena Alimentaria para que nadie venda a pérdidas?«

De entrada, lamentan que solo quiera llamar a la gran distribución y a los consumidores, «y no sabe que si los agricultores no producen alimentos no habrá nada que comer«. Al ignorarles, Andreu concluye que »la ministra no quiere 'topar' los precios, sino embestir al sector, va a acabar con él«, haciendo el juego de palabras con una propuesta que »absurda«.

En cambio, entre las medidas alternativas que -a su juicio- sí puede adoptar Yolanda Díaz, este portavoz agrario enumera varias en las que tiene «margen». Con el 60% del incremento del combustible, que son impuestos, el gasoil se triplicado desde mediados de 2021 (de 60 céntimos a a 1,70 euros); en la electricidad, con una bonificación para las granjas de vacuno, donde hace falta diariamente la energía. O el coste de la mano de obra: «El salario mínimo nos lo quiere subir dos veces en un año«.

Como retrato del contexto en el que llega este anuncio, hay algunos datos desoladores expuestos el pasado fin de semana en un congreso con medio millar de agricultores de España y Portugal. Así, cuando el país vecino entró en la Unión Europea había 100.000 ganaderos y hoy quedan 3.000, «cifras estrapolables a España, donde el sector se está muriendo, en situación crítica por el pienso, la energía y el agua«.

En este encuentro, la inmensa mayoría de los cerealistas, que cultivan en secano, ya han decidido que no van a sembrar este año, debido a la sequía y los precios del gasóleo, principalmente.

Esta crisis «global» e internacional puede amenazar pronto el abastecimiento en cadenas de distribución si se deja de producir, según Andreu, para quien «no es lo mismo poner topes a la energía eléctrica, que tiene compensaciones por otro lado». En cambio, en los frutos y hortalizas, por ejemplo, eso tendrá otros efectos: «Si dices que no se puede vender a más de un euro un kilo de naranjas, luego va para abajo y no se le pagarán ni a cinco céntimos al agricultor, que ya este año en muchas explotaciones ha dejado de podar y de hacer otras tareas por falta de rentabilidad con los costes disparados».