El tripartito valenciano, obligado a cambiar tres años después la ley de Podemos para revocar a Rita Barberá

La justificación para poder revocarlos era que incurrieran en comportamientos que susciten pérdida de confianza o provocaran el desprestigio de las instituciones. El PP fue el único partido que votó en contra y, posteriormente, el Tribunal Constitucional tumbó esos artículos.

La intención - especialmente desde el PSPV - de cambiar la ley de senadores para acelerar el proceso de designación ante un posible escenario de adelanto electoral autonómico como el sucedido en abril, ha permitido introducir también la supresión de los artículos referentes a la revocación. Todo ello ha sido suscrito de forma casi unánime por los partidos (a excepción de Vox).

En las intervenciones de este miércoles, Compromís y Podemos únicamente han hecho referencia al proceso de designación de los representantes, mientras el portavoz del PSPV, Manolo Mata, ha recordado que en 2016 votó la ley por lealtad, cuando en realidad le parecía “una aberración jurídica”: “Lo que más rabia me daba de mi padre era que me dijera ‘ya te lo decía yo’. Y aquí estamos”.

Desde el PP, el diputado Alfredo Castelló ha remarcado que esa norma fue “una persecución política, un asesinato de la Constitución y una burla a la democracia”. “Se trató de una ley contra Rita Barberá que pretendía eliminar a un icono del PP con una trayectoria política intachable”, ha afirmado.

La parlamentaria de Ciudadanos Mamen Peris (grupo que hace tres años aprobó la reforma) ha indicado que un Parlamento “no puede revocar a un senador aunque pueda dañar una institución”, por lo que están “orgullosos de respetar al Tribunal Constitucional”.

Por su parte, el diputado de Vox José María Llanos ha criticado que a su partido no se le ha ofrecido la posibilidad de apoyar la norma, por lo que se han quedado al margen. Además, ha acusado al resto de “bullying” hacia ellos.