Montiel descarta presentarse a la reelección al frente de Podemos en la Comunidad Valenciana

El dirigente autonómico del partido de Pablo Iglesias ha asegurado que estos dos años ha sido un orgullo y un honor ser el secretario general pero Vistalegre II puso de manifiesto, según su análisis, que hay “demasiados personalismos”. El proyecto debe estar por delante de los intereses personales y por eso, no optará a la reelección. Según ha declarado “hay que anteponer la generosidad y el proyecto a las personas”, por eso anuncia que no será candidato: “no es una cuestión personal, es fruto de una larga reflexión política y personal muy meditada”, ha afirmado.

El todavía secretario general de Podemos avanza que trabajará para que haya una única candidatur a a la dirección del partido, una candidatura integradora que persiga la valencianización de Podemos , y que huya de la lógica de Madrid.

La formación política morada ha doblado sus afiliados en estos dos años, ya tiene 48.000 y es el momento de la inflexión, ha afirmado Montiel. Por eso, y en búsqueda de esa unidad, no hará campaña por ningún candidato y solo participará en los actos que defiendan un proyecto compartido.

Sobre las Corts y Acuerdo del Botánico , Montiel tiene la intención de continuar como portavoz en las Corts, donde “hay mucho trabajo por hacer”, ya que en su opinión el Consell se ha “desconectado” de los ciudadanos. Se dedicará al cien por cien al parlamento valenciano, porque le interesa mucho más esa función de la política. Según señala se abre una nueva etapa, ya que cada vez le preocupan más los problemas concretos y reales de la gente y menos los “juegos de tronos ”.

Será en les Corts, ha dicho, donde Podemos aumente su función fiscalizadora al Consell. Un Consell que no puede dar nada por “establecido”, dice Montiel, que insiste en que el apoyo al gobierno de Ximo Puig dependerá del grado de cumplimiento de los acuerdos del Botánico, y recuerda que quedan dos años de legislatura. Montiel cree que se ha abusado de la lógica de que l’Acord del Botànic está a prueba de bomba, cosa que él no cree.

En los próximos dos años, Montiel asegura que serán muy exigentes y muy críticos, y que todo dependerá de la “capacidad del gobierno de reconectar con los orígenes del acuerdo y con el compromiso de cambio”. De contrario, afirma, “puede pasar cualquier cosa”.