El hijo de Gerardo Rueda reitera la originalidad de las obras póstumas que vendió al IVAM

El heredero del artista fallecido en 1996, José Luis Rueda , ha seguido defendiendo su versión ante el tribunal tras tener que suspenderse la vista el pasado jueves por una indisposición del abogado de la también procesada Consuelo Císcar, exdirectora del IVAM.

Rueda ha señalado que las piezas que vendió al instituto -ocho entre 2004 y 2006, sin contar las 90 que se donaron- «estaban en vida y documentadas en todos los catálogos de mi padre» de exposiciones del IVAM o del Reina Sofía. Además, de las que son póstumas, ha apuntado, cedió a la entidad pública «la primera tirada dentro de la original» de las doce que podría fundir como heredero.

El procesado ha comparado los «diez millones de euros» en los que se valoraron todas las obras vendidas y donadas con los «tres y pico» que se le pagaron por ellas «en cinco años y sin intereses». « ¿Dónde están las sobrevaloraciones de los precios? ¿En qué he delinquido yo? ¿Dónde está el dolo? En nada», ha precisado.

«No urdí nada -como asegura la fiscal- con la señora Císcar porque esto viene de la época de Carmen Alborch», que era directora de la entidad en 1992, cuando su padre eligió las obras que estarían dentro de esa donación. Él era quien indicaba las dimensiones de las esculturas y su heredero se encargaba de negociar todo el proceso de fundición con Fernando Capa, ha asegurado José Luis Rueda.

Según Rueda, las adquisiciones bajo sospecha fueron pasando por todas las comisiones del instituto, internas y externas, que «no tumbaron» los contratos pese a las presuntas irregularidades que algunos dirigentes del IVAM revelaron en instrucción. «A mi me falsifican una firma una sola vez y voy a la comisaría en el minuto uno», ha apuntado, al tiempo que ha recordado que eso no ocurrió pese a que entre 2005 y 2009 se realizaron 22 exposiciones con obra póstuma de Gerardo Rueda en el museo.

«Hasta 2015 tampoco me denuncian, casualmente, cuando hay un cambio de Gobierno » -el PP perdió la Generalitat en favor de PSOE y Compromís- para, a su juicio, socavar la reputación de Consuelo Císcar, cuya gestión ha alabado. Sin embargo, no ha respondido a porqué las mismas obras se tasaron en mayo de 2010 -por dos millones y un millón y medio de euros- en dos operaciones distintas en las mismas fechas, con una diferencia de 500.000 euros.

«Han destrozado a mi padre, a mí, a su obra y a la memoria de un genio, y a eso no hay derecho», ha lamentado tras hacer referencia en numerosas ocasiones a que perdió una muestra en la esplanada del Louvre en París, a razón de tres millones de euros, por escultura cuando fue imputado.

El procesado, para el que el Ministerio Público pide cinco años de prisión por un delito continuado de malversación, ha pedido disculpas por su «efusividad» en la anterior jornada del juicio, aunque ha seguido mostrando la misma actitud y ha dicho no entender las «preguntas ofensivas» de la fiscal. Rueda ha respondido también a las preguntas de la defensa pero no de la Abogacía de la Generalitat ni de Acción Cívica, la asociación que ejerce la acusación popular.

A la largo del interrogatorio, además, ha vuelto a arremeter contra el exdirector artístico del IVAM Vicent Todolí y el que fuera subdirector general de Administración del museo, Joan Llinares . Sobre el actual responsable de la Agencia Valenciana Antifraude ha llegado a decir que es el «fundador de la acusación particular» en este proceso.