Denuncian que el jubilado español alistado a la guerrilla en Ucrania ha sido apresado por el ejército ruso

Sus parientes y amigos de la localidad valenciana de Carlet han hecho saltar todas las alarmas ante el relato de varios testigos que vieron cómo los soldados se lo llevaban en un coche después de una de las protestas en las que había participado en territorio sitiado. En concreto, dejaron de tener contacto con él el viernes pasado. ABC tampoco ha obtenido respuesta en sus intentos de comunicarse con el activista en los últimos días. Además, su perfil en redes sociales está restringido.

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Pese a que no existe una denuncia oficial, fuentes de la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana explican que han trasladado estas informaciones al Ministerio de Asuntos Exteriores a primera hora de este martes, que ya investiga la situación y el posible paradero del desaparecido .

La embajada española de Kiev, ubicada actualmente en Varsovia, y los servicios de emergencia consular de Exteriores «están siguiendo atentamente» el caso y «permanecen en contacto con su familia», según fuentes diplomáticas. De confirmarse, se trataría del primer español prisionero de los militares rusos, aunque siguen abiertas todas las hipótesis.

Este exfuncionario natural del municipio situado a treinta kilómetros de Valencia, se marchó en 2014 a Ucrania, donde le conocen como Mario, para servir como voluntario después del estallido la guerra en el Donbás y de la anexión de Crimea a Rusia.

«Me dijeron que me matarían por apoyar a Ucrania, pero me dio igual, yo quería ayudar al pueblo que acogió a más de 3.600 niños después de la Guerra Civil Española», explicaba él mismo a este periódico en una entrevista a principios de marzo , cuando Rusia ya había iniciado los bombardeos a escasos kilómetros de su casa.

García ayuda al ejército ucraniano sobre el terreno llevando alimentos, ropa y medicamentos a los soldados y se alistó para salir en las guerrillas que controlan la ciudad por las noches . A pesar de la insistencia de sus hijos y nietos, no ha querido regresar a España en ningún momento. «Voy a ayudarles hasta la muerte», subrayó a ABC, poniendo el foco en que figuraba en las listas negras de los rusos.

Su hermana, Vicenta García, ha asegurado a la televisión pública valenciana À Punt que una amiga ucraniana de Mario les ha advertido sobre lo ocurrido durante una manifestación pacífica contra la invasión el pasado sábado a mediodía: «Me dijo que unos compañeros -amigos en común- vieron como los rusos lo subían a un coche y no sabemos nada más».