El coordinador del rescate de Julen: «Hicimos en 12 días lo que se tarda en hacer seis meses»

El también ingeniero de esta rama por la UPV y que también participó en las labores de salvamento, Mauricio Delgado, ha defendido que en estas situaciones se debe "usar el sentido común y aplicar los conocimientos que se aprenden en el aula. De la UPV, se sale formado".

García ha explicado a los alumnos de primero los detalles de la operación, que durante 13 días mantuvo a España pendiente del rescate en el municipio malagueño. Por la complejidad del terreno y de las labores de salvamento, resultó una operación "inédita en todo el mundo", ha considerado el coordinador del rescate, que ha impartido una conferencia en la UPV, donde ha expuesto los pormenores de la intervención.

"Al día siguiente del suceso, recibimos la llamada de socorro de las autoridades, que estaban viviendo una situación dificilísima. En Málaga, contamos con un grupo de WhatsApp que incluye a 200 del total de 700 ingenieros de Caminos que tiene la provincia censados. Escribí un mensaje: 'El que entienda de esto, que venga'. ¡Como si alguien pudiese entender de algo así! A la media hora, nos presentamos en el pozo 14 compañeros. El equipo quedó finalmente integrado por ocho ingenieros".

El coordinador de las operaciones ha indicado que tuvieron "muchísimos condicionantes que hicieron que la operación fuera aún más compleja": la orografía del terreno; los accesos hasta el pozo; las peculiaridades geológicas y geotécnicas de la zona, con materiales "muy variados, pero siempre de una gran o extrema dureza ".

"Había un niño a 71 metros en un pozo de 25 centímetros de diámetro. Y no se le veía", ha continuado García, que recalca que trabajaron "a ciegas , pero siempre con la hipótesis de que estaba con vida, por lo que todos los procedimientos constructivos debían asegurar la integridad física" del menor y preservarse la inestabilidad del tapón de tierra para evitar que descendiera aún más, hasta la cota final de 114 metros.

El responsable del rescate ha hablado del equipo humano. "Todos teníamos experiencia. Acumulábamos muchos años de profesión. Pero ninguno estaba preparado para un trabajo así ". "Nunca nos habíamos encontrado en una situación como esa y espero no volver a hacerlo. Construimos en 12 días lo que, en condiciones normales, habría costado 5 o 6 meses. Pero hay que aceptar que puede volver a ocurrir, porque las catástrofes existen".

Por su parte, Delgado ha apuntado que, a raíz del suceso, la Junta de Andalucía está tomando medidas en la localización de pozos que no estén sellados. "El accidente ha sensibilizado lo suficiente a la opinión pública como para que, además, cada propietario de terreno, de manera particular, tome ese tipo de decisiones".

Delgado ha destacado el tiempo récord en que se llevó a cabo la construcción. "Se explica por la colaboración de todas las autoridades. Tuvimos llamadas del Ministerio, Consejerías, empresas privadas, particulares... Nadie preguntó cuánto costaba . Fue un país entero volcado en salvar a un niño. Y trabajamos en unas circunstancias únicas, en una carpa de tela improvisada, con mucho frío, sin wifi , con los bomberos, los mineros de Asturias y la Guardia Civil asomándose cada poco para ver qué habíamos decidido", ha descrito.

Según Delgado, "las soluciones que adoptamos allí los ingenieros las tomamos de forma colegiada. Y eso es muy importante". El ingeniero ha aconsejado a los alumnos "usar el sentido común y aplicar los conocimientos que se aprenden en la escuela". "Esa capacidad que te enseñan en el aula para resolver problemas complejos con pocos medios es lo que te permite enfrentarte a sucesos como este", ha dicho.