Ciudadanos evita votar a favor del cierre de Cofrentes pese a su apoyo inicial

La propuesta ha contado con el apoyo de los partidos que sustentan el Consell (PSPV, Compromís y Podemos), quienes presentaron la propuesta de forma conjunta . El PP ha votado en contra, mientras que Ciudadanos finalmente se ha decantado por abstenerse pese a que inicialmente iba a dar el voto favorable, tal como expresó su portavoz, Alexis Marí, la pasada semana.

Una posición que se produce después de que su alcalde en Cofrentes, Salvador Honrubia, se pronunciara precisamente contra el cierre por la actividad económica que genera en la zona y llegara a trasladarlo a la dirección del partido.

Ciudadanos había decidido presentar una enmienda en ese sentido para realizar un estudio previo independiente sobre el impacto, pero al no serle aceptada una parte de ésta ha rechazado el acuerdo planteado por el tripartito.

La diputada de la formación naranja Rosa García ha criticado que se plantee el cierre sin un plan energético alternativo ni un plan económico para los trabajadores y la región. Además, ha acudado al Consell de hacer en este caso lo mismo que ha hecho Donald Trump con las políticas medioambientales impulsadas por Barack Obama, que ha decidido «eliminar de un plumazo». «Atacan Cofrentes por sectarismo», ha concluido.

El PP también se ha opuesto al desmantelamiento de la central nuclear al asegurar que la Comunidad Valenciana «no dispone de un parque de renovables suficiente» para cubrir la energía producida por Cofrentes. El parlamentario popular Vicente Casanova ha asegurado que el cierre tendría «graves consecuencias», como el incremento de la tarifa eléctrica un 25 % y de las emisiones de dióxido de carbono un 50 %, y sustituirla por energías renovables en 2021 implicaría la construcción de 2.040 molinos de viento o 26.000 hectáreas de paneles solares.

En su opinión, «no es razonable», sobre todo teniendo en cuenta que en dos años no se ha construido ningún molino y se han instalado muy pocos paneles solares, por lo que «no hay necesidad de retirar» estas instalaciones, sino que hay que garantizar, con informes y controles, que sean fiables.

Por su parte, el encargado de defender la iniciativa, Juan Ponce, se ha alegrado de que «por fin» la mayoría de la Cámara diga «sí al cierre definitivo de Cofrentes» por responsabilidad, solidaridad, economía y porque hay que luchar contra el cambio climático.

El diputado de Compromís ha advertido de que las centrales nucleares «son peligrosas, y más las viejas», y ha considerado que «no es tan complicado» ni «tan imposible» que en Cofrentes se pudiera producir «la gran catástrofe» sucedida en Fukushima en 2011, que «nadie pensó que pudiera pasar y pasó».

Además, ha recordado que Alemania cerrará todas sus centrales nucleares en 2022, con menos horas de sol que España, y ha reivindicado la necesidad de apostar e impulsar las energías renovables para alcanzar que el 20 % de la energía total consumida sea renovable.