Marcos Benavent admite ante el juez que cobró «mordidas» y las repartió a María José Alcón

Benavent y otros tres imputados en una de las piezas separadas del caso Imelsa en la que se investigan estas supuestas mordidas a cambio de contrataciones ilegales ha declarado hoy en el juzgado de Instrucción número 18 de Valencia.

" Yo entregaba el dinero a María José -Alcón - y Vicente -Burgos- -entonces presidente de la Fundación Jaume II el Just y marido de Alcón-, al partido yo no entregué ninguna cantidad", ha explicado a la salida del juzgado.

Las conversaciones telefónicas entre la exconcejal y el «yonki del dinero» (que exhibió un abanico con el lema de « Corruptos fuera») revelan los amaños de los contratos y el cobro de «mordidas», de acuerdo con los informes de la Unidad del Crimen Orgaizado (UCO) . Los investigadores otorgan a Benavent un doble rol: actuaba como «intermediario» con los empresarios y se encargaba de cobrar y repartir con Alcón el dinero obtenido con las «mordidas», que según el sumario del caso ascendería a 83.000 euros.

Preguntado por unas conversaciones que constan en el sumario del caso en las que él mismo le dice a Alcón "10.000 euros para ti, 5.000 para mi y 5.000 para el partido", Benavent ha afirmado: "las conversaciones son muy relativas".

José Adolfo Vedri , responsable de la firma Engloba, negó haber abonado comisiones a cambio de una de las adjudicaciones que se hayan bajo sospecha.

Sin embargo, ha reconocido que sí que se desviaron fondos al partido obtenidos de las mordidas por contratos adjudicados desde las empresas públicas Ciegsa, de la Generalitat, e Imelsa, de la Diputación de Valencia.