El informe del caso Dalmases desvela la complicidad de TV3 con la defensa jurídica de Borràs

El Terrat aceptó, a petición del equipo de la presidenta del Parlament y para que Borràs fuera entrevistada en 'FAQS' el pasado 9 de julio, que no se exhibiera durante la entrevista una de las principales pruebas de la acusación en su causa judicial: los mails de 2013 que Borràs se cruza con su amigo y beneficiario de los contratos en los que se explica el sistema del 'pitufeo' o fraccionamiento que, presumiblemente, se llevó a cabo cuando era directora de la Institució de les Lletres Catalanes. La petición surgió de Boye y la dirección de 'FAQS' aceptó.

Según consta en el informe del caso Dalmases, consultado por ABC, y dado a conocer, este viernes, a los diputados adscritos a la Comisión de Control de la Actuación de la CMMA del Parlament por el director de TV3, Sigfrid Gras, la entrevista de Borràs se concertó por la amistad que Dalmases mantiene desde hace años con la subdirectora del programa. Fueron estos quienes acordaron las condiciones de la entrevista, que el equipo de la presidenta del Parlament quería que se hiciera en la cámara catalana y solo con la presentadora de 'FAQS', Cristina Puig.

Sin embargo, la dirección del programa de TV3 no aceptó esta petición y Borràs tuvo que desplazarse a los estudios de la cadena autonómica, en Sant Joan Despí (Barcelona). La dirección, en manos de Pere Mas, también se negó a cambiar los periodistas que podrían preguntar durante la entrevista, porque ya los tenía confirmados. Las peticiones que sí se aceptaron, según consta en el informe, es que no apareciera en el 'videowall' del programa «los mails de Laura Borràs que aparecen en la instrucción judicial donde explica a su interlocutor cómo fraccionar contratos» y «que no haya repreguntas» de los periodistas.

Respecto a la primera condición, no solo la acepta la dirección de 'FAQS' sino que «se habla con su abogado, Gonzalo Boye, para que todo lo que explique el colaborador Jordi de Planell a la hora de plantear el caso judicial sea objetivo, preciso y se entienda». Así, la exposición de Planell, coordinador de redacción del programa, sobre el caso judicial de Borràs contó con la censura del letrado. Los mails quedaron sin mostrarse en televisión y definidos por el periodista como algo que el juez instructor considera como prueba. «Impecable explicación (del caso)», llegó a definirla Puig en directo aquel 9 de julio. Y respecto a la segunda petición, se aceptó en parte: no se cambiarían los periodistas previstos, pero sí se limitaría su participación y no harían repreguntas.

Pero el programa no fue como estaba previsto y los periodistas preguntaron varias veces a Borràs. Dalmases, que formaba parte del equipo de la presidenta del Parlament y de Junts, se enfadó con Hernàndez, al considerar que se había roto el pacto. El informe, firmado por Gras, recoge la opinión de la empresa productora y la de Dalmases sobre lo que ocurrió tras la entrevista a Borràs. Y no llega a ninguna conclusión. Las dos versiones difieren en la intensidad de la discusión, y si hubo o no gritos y golpes y si el diputado cogió del brazo a la subdirectora, hecho que este niega.

Según la versión de El Terrat, tras la entrevista, Borràs sale «muy enfadada y dice que ha hecho un ensayo de cara al juicio» y lo dice delante de la subdirectora y la productora de invitados, que esperaron a la presidenta del Parlament a la salida del plató para acompañarla hasta la puerta de los estudios. Tras pasar por delante de Dalmases, este «aparta a la productora de invitados y coge por el brazo a la subdirectora y cierra la puerta (de una de las salitas previas al plató)». Dalmases «empieza a gritar cosas como 'me has traicionado', 'has faltado a tu palabra', 'programa de mierda', 'esto no me lo puedes hacer', 'presentadora patética' [en referencia a Cristina Puig], 'mala periodista', combinado con golpes sobre la mesa».

En un momento dado, Borràs intenta calmar a Dalmases: «Francesc, basta», le dice, según la versión de la productora. Durante este suceso, también el jefe de prensa de Borràs, Pep Elies, «se queja de las preguntas de los periodistas». Al tiempo que esto ocurre en una sala de los estudios, la productora de invitados del programa envía un mensaje de móvil al grupo que la dirección de 'FAQS' tiene en Whatsapp: «Han encerrado a Mònica».

Al oír los golpes de Dalmases sobre la mesa, los técnicos de sonido que ponen los micros a los entrevistados se acercan hasta la sala en la que está el equipo de Borràs, la propia presidenta parlamentaria y la periodista. El ruido es tal que el regidor de aquel día «sale del plató para pedir silencio, porque los gritos llegan al plató». El informe señala, a continuación, que alguien, sin identificar, abre la puerta de la habitación «para sacar a Mònica de allí».

Tras la bronca, es la propia subdirectora la que acompaña a Borràs y su equipo hasta la puerta de salida del edificio de TV3. «No hablan durante el trayecto». Y al llegar a la puerta giratoria de salida: «Borràs da un medio abrazo en silencio a Mònica», recoge el informe, según la versión de El Terrat.

Lo ocurrido el 9 de julio, tras la entrevista a Borràs, para Dalmases, sin embargo, no fue exactamente así. El diputado de Junts explica que tiene amistad con Hernàndez, desde hace más de diez años, y su versión coincide con la de la empresa productora en el acuerdo cerrado entre las dos partes (el diputado asegura que tiene «los mensajes» de los días previos que lo confirmarían): no emitir los mails que incriminan a Borràs y sin repreguntas, por recomendación de Boye, para evitar que Borràs se vea forzada «a avanzar su estrategia de defensa».

Para Dalmases, este tipo de acuerdos son normales: «En el mundo periodístico, todo el mundo sabe que estas negociaciones, a la hora de encarar una entrevista, son habituales entre la dirección del programa y el entorno del político entrevistado». Pero sí reconoce que no es habitual que esta negociación la lleve en primera persona un diputado. «Pero hay que aclarar que hay una relación de amistad muy antigua entre Mònica y yo, y que ella también utiliza este canal de confianza para acordar la entrevista sin pasar por más trámites oficiales, como corresponde».

Además, Dalmases asegura que Hernàndez y Borràs también se conocen desde hace «tiempo», a través de él, y que antes de la entrevista en TV3 estuvieron haciéndose fotos juntas en el camerino. El problema entre ambos se puso de manifiesto durante la propia entrevista: Dalmases y Hernàndez se intercambian mensajes y, según la versión del diputado, la subdirectora reconoce que la entrevista se le está escapando de las manos a Puig, porque «está permitiendo repreguntar repetidamente a los periodistas invitados», algo que habían acordado que no podía pasar.

Al acabar la entrevista, Dalmases «discute» con Hernàndez, pero niega que la cogiera «por la muñeca» o «el brazo» y defiende que se metieran en una de las habitaciones contiguas al plató «para no discutir en medio de los pasillos». Dalmases apunta al jefe de Gabinete de Borràs, Salvador Esteve, como la persona que cierra la puerta de la sala. Pero niega cualquier agresión: «No hay violencia, no hay insultos ni amenazas por mi parte. Pero reconozco que estoy indignado y muy dolido y la conversación es vehemente».

Durante la bronca, Dalmases le reprocha a la subdirectora no haber respetado el acuerdo y añade que la entrevista de Borràs se debe a la confianza de esta en el diputado y en la confianza del propio Dalmases en la periodista de 'FAQS'. Según este, la subdirectora se disculpa con la presidenta del Parlament y con él por «no haber cumplido y reconoce que 'se me ha descontrolado la situación'».

Con todo, el diputado autonómico se defiende de las acusaciones de abuso indicando que no intimidó a nadie y que «solo» le hizo saber a la subdirectora del programa de TV3 su «decepción» por no haber respetado «ninguno de los términos» que se habían acordado. También niega haber insultado a Hernàndez y «golpeado algún mueble», un ruido escuchado fuera de la sala que atribuye a coger el móvil rápidamente de encima de la mesa: «Hice ruido al hacerlo, nada más». Este es un punto clave en el que hay discrepancia entre la versión de El Terrat y la del diputado. La «conversación» se acaba cuando Borràs dice que se quiere ir a casa, explica Dalmases, y confirma que Hernàndez acompaña al equipo de Borràs hasta la puerta de TV3 y se despiden «con un beso y un abrazo».

Unos días después, el director y la presentadora de 'FAQS' desvelan en RAC1 (la radio del grupo Godó) el enfado del equipo de Borràs por cómo había salido la entrevista. Según Dalmases, desde ese momento la subdirectora le pide disculpas mediante mensajes de móvil y mantienen un intercambio de opiniones, hasta el punto de que suavizan la relación. Pero todo se desmadra cuando, días después, 'El Diario' y 'Nació Digital' publican la bronca «magnificando» el caso y «sacando de contexto los hechos», relata el diputado de Junts. «A partir de aquí se desencadena una tormenta política sin precedentes, que sin duda va más allá del ámbito periodístico», añade. El caso tiene una derivada en el Parlament, todavía pendiente de resolver.

Así, el informe de la CCMA, firmado por el director de TV3, que contiene básicamente la versión de las dos partes, la empresa productora y Dalmases, no concluye si hubo intimidación o abuso por parte del diputado. Gras señala en el informe lo que hizo TV3 tras conocer la bronca y constata que «en el lugar de los hechos no había ningún trabajador de la CCMA que fuera testigo directo de lo que sucedió», dando por hecho, eso sí, los «gritos» en base a lo manifestado por el regidor, los técnicos de sonido y un ayudante de producción, aunque no vieron nada.

Tras el hecho investigado, recoge el director de TV3, El Terrat trasladó a la televisión autonómica catalana que la subdirectora del programa no quería comunicar nada sobre lo sucedido. Y el director del programa, días después, expuso el caso a diversos directivos de TV3, durante una «conversación informal», y seguidamente al propio Gras, al que se le explicó de «manera genérica» los hechos del 9 de julio, según la versión de la empresa productora.

Una vez el director de TV3 tuvo conocimiento de los hechos, se puso en contacto con la empresa y la dirección del programa, que le trasladaron «la voluntad de la persona afectada de no dar a conocer los hechos» y que, por «respeto a la decisión de la persona afectada», ni la dirección de 'FAQS' ni El Terrat quieren ir «más allá».

 Aun así, tanto Romà como Gras han recordado en la comisión parlamentaria que, desde el momento en el que conocieron la bronca, «condenaron» lo sucedido y exigieron «respeto para los profesionales de los medios de comunicación en cualquier circunstancia» y han avanzado que modificarán el protocolo para limitar el acceso a los estudios de las personas que pueden acompañar a los políticos que sean entrevistados. La comisión ha aprobado, por unanimidad, la comparecencia de Dalmases (que es miembro de la misma) y Mas para que den explicaciones por lo sucedido.

Puesto en contacto con este medio, el Sr. Boye ha remitido el siguiente escrito de rectificación:

1- El Sr. Boye no hizo ninguna petición al programa FAQs ni a ninguno de sus integrantes, representantes o presentadores.

2- El Sr. Boye no hizo ninguna recomendación al respecto ni del contenido de las preguntas ni de las respuestas que se realizaron en dicho programa

3- El Sr. Boye no ha censurado ninguno de los contenidos de dicho programa ni de ningún otro.