Rovira asegura ahora que ERC «nunca» defendió unilateralidades y apuesta por «negociar» con Rajoy

Rovira, que ha presentado frente al Parlamento de Cataluña la candidatura de ERC y los grupos que la integran para el 21-D, Demòcrates, MES, Avancem y Socialisme, Cataluya i Llibertat, ha defendido así el programa electoral -de ERC y del PDECat- que hace referencia a aparcar la vía unilateral hacia la independencia.

Su justificación es que ERC firmó en la anterior legislatura autonómica un «contrato» con los electores y que actuó para cumplir con el mismo de forma «multilateral», por la relación que tenía con estos electores, y bajo la consigna de «obedecer los mandatos democráticos emanados de las urnas».

De cara a la próxima legislatura, Rovira ha dicho que esperan renovar este contrato y que apostarán por «negociación y diálogo» tras las elecciones del 21-D, en las que parten como favoritos, según todas las encuestas. En este sentido, uno de los puntos en común que se están negociando con el PDECat requerirá al Gobierno «el respeto al resultado electoral» y «la apertura de una vía de diálogo y negociación» para implementar el mandato de las urnas.

La número dos de ERC ha defendido que su candidatura, que incluye independientes y otras formaciones políticas minoritarias, demuestra «apertura y capacidad de transversalidad para representar mejor a la sociedad» catalana, superando así lo que ha denominado como «partidocracia», en referencia al predomino de las fuerzas políticas.

En el acto de presentación de la lista de ERC han participado, entre otros, el dirigente de Demòcrates Antoni Castellà, la representante de MES Magda Casamitjana, el miembro de Avancem Fabián Mohedano y los independientes Ernest Maragall, Rubén Wagensberg y Jenn Díaz, todos ellos integrantes de la candidatura.

Por otro lado, Rovira se ha reafirmado en sus declaraciones en las que aseguró que el Gobierno amenazó con «muertos en la calle» si se proseguía con el proceso independentista unilateral, y ha considerado que esta polémica ha servido para que el Gobierno renuncie de forma expresa a la violencia.

«Si de algo ha servido toda esta polémica es para que el Gobierno español haga declaraciones de que estas amenazas no son verdad , de que ellos no planean el uso de la violencia extrema en contra de los ciudadanos», ha expuesto Rovira.

Así, la dirigente independentista ha defendido que sus palabras han generado una dinámica positiva por la que se ha descartado el uso de la violencia: «Es una buena noticia que la violencia extrema no esté encima de la mesa y estemos más cerca del diálogo y de la negociación».

La coordinadora general del PDeCAT, Marta Pascal, ha descartado también por su parte que el independentismo apueste por la unilateralidad tras las elecciones del 21 de diciembre: «No estamos en esta pantalla».

Pascal considera que el objetivo ahora es incrementar los apoyos soberanistas y buscar una relación "bilateral" con el Gobierno central, y ha señalado que en esto trabajan los partidos de cara a compartir puntos de sus programas electorales. «No todo lo hemos hecho bien. Y la unilateralidad de la última fase del proceso es derivada de una actitud del Gobierno de Rajoy con el que no ha habido nada que hablar», ha destacado.

A su juicio, ahora el soberanismo debe buscar «nuevas formas de seguir adelante sin renunciar al objetivo», y ha admitido que necesitan más tiempo.