Pedro Sánchez: «Puede venir de un voto, nadie pensaba que ganaría Trump»

Con este espíritu, y empujado por las 4.000 personas que según el partido llenaron en Barcelona el pabellón olímpico del Valle de Hebrón -el PSC, y ningún otro partido, llena ya un Sant Jordi-, el candidato Pedro Sánchez alertó del riesgo de que por un exceso de confianza, las «tres siglas de la derecha acaben sumando».

«Hay buen ambiente, te lo dicen en la calle, se nota, y también lo dicen las encuestas. Pero cuidado, nadie pensó que Trump podía ganar, o que el Brexit podía ser una realidad, o que Bolsonaro sería presidente de Brasil, o que en Andalucía gobernaría el PP con Cs y la ultraderecha», ha apuntado el candidato, dando pie a lo que ha sido una constante de todo el acto: el discurso del miedo a la derecha, a la ultraderecha, a la involución... a que gobiernen «quienes estuvieron en Colón».

«Puede venir de un voto. Y no es suficiente con ganar. La derecha y la ultraderecha pueden sumar», ha añadido el candidato del PSOE que directamente pidió el apoyo a quienes dudan entre Podemos, Cs o la abstención. La alusión a los posibles votantes de Cs enlazaba directamente con sus repetidos «qué decepción, qué decepción» que le dedicó al líder naranja durante los dos debates televisivos: un reproche, como ha apuntado esta tarde, por el tránsito de Albert Rivera «de la socialdemocracia a la ultraderecha». «Debe tener un armario muy amplio para todas sus chaquetas», ha añadido.

Lanzado, el candidato también ha aludido directamente al líder y candidato del PP, Pablo Casado, al que ha acusado de buscar una involución de derechos sociales en España. «El PP siempre llegaba tarde y mal a todos los avances sociales, pero los mantenía. Ahora no, quieren volver a atrás, involucionar. Esto es muy serio», ha alertado el candidato.

Las alusiones a Casado y a Rivera han sido acogidas con abucheos por parte del público, un contraste con la ovación, y el auditorio puesto en pie, con que se ha celebrado el «nunca es nunca» de Sánchez a la independencia de Cataluña, un buen termómetro para despistados sobre el sentir real de la militancia del PSC. «No es no, no va a haber referéndum ni independencia» , ha añadido Sánchez para insistir en que el domingo está en juego la «convivencia» y la posibilidad de que haya un gobierno «que hable con todos, pero siempre dentro de la Constitución», lamentando que la derecha le acuse de pactar con independentistas incluso después de «haber articulad el 155 junto a Rajoy».

En el mitin también ha intervenido el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, que también ha llamado en este sentido a concentrar el voto para evitar un retorno de la derecha, porque «entre otras cosas no quiero volver al armario». Iceta le ha reconocido a Pedro Sánchez haber recompuesto el PSOE y recordando ese lema que hizo fortuna -«¡Pedro, líbranos del PP!»- se ha respondido él mismo. «¡Y lo hizo!». En la misma línea, la candidata por Barcelona, Meritxell Batet, ha insistido en apelar al miedo a la derecha: «No queremos un gobierno que nos lleve a 40 años atrás».