Marcela Topor, la musa independentista de Puigdemont

La mujer del presidente se llama Marcela Topor, tiene 38 años y aunque nació en una ciudad del noreste de Rumanía ha acabado instalada en Cataluña por amor. Topor, una filóloga que trabaja como periodista, apareció en la vida de Puigdemont en 1998. Quienes los conocen dicen que lo suyo fue un flechazo. Ambos coincidieron en el Festival Internacional de Teatro Amateur de Gerona, al que ella acudió como actriz en una compañía universitaria.

Su relación avanzó viento en popa y dos años después de conocerse se casaron por lo civil en Rosas (Gerona). Repitieron más adelante el enlace en Rumanía, siguiendo el ritual ortodoxo. Con el apoyo de su marido, Topor empezó a trabajar como periodista en el Catalonia Today, una revista hecha en inglés, y también colabora en la televisión de El Punt Avui realizando entrevistas a extranjeros residentes en Cataluña. El matrimonio tiene dos hijas: Magalí, de 8 años, y Maria, de 6.

Si un hecho destacan los allegados de la pareja es la capacidad de integración que Topor ha tenido. Sus facilidades por los idiomas han permitido que ya hable catalán sin ningún problema. La primera dama, además, mostró recientemente en un artículo su alegría sobre la evoluciónn del proceso secesionista, algo que parece que le ha inculcado su marido.

Al igual que su antecesora,Helena Rakosnik, Topor promete estar al lado de su pareja en los intensos momentos que le esperan al frente de la Generalitat de Cataluña.