La CUP fomenta el «no» a Jordi Turull entre sus bases

El único compromiso claro hecho hasta ahora por los de Puigdemont y Junqueras con los cuperos es el de celebrar la «multiconsulta», que debería concluir el proceso constituyente. Esto fundamento la predisposición de la CUP para fomentar el «no» entre sus bases, según el texto al que ha tenido acceso «La Vanguardia».

Los cuatro votos de la CUP tiene una importancia capital para que la investidura de Turull salga adelante en primera vuelta. Sin embargo, hasta este momento, los diputados liderados por Carles Riera solo han asegurado una abstención, pero ese veto no valdría para investir a Turull en una primera sesión, antes de que sea citado para una vistilla con el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena que podría acabar con su ingreso en prisión.

El secretariado nacional de los cuperos ha dispuesto una votación «en árbol», por la cual primero deberán decidir si apoyan al número cuatro de Junts per Catalunya a la presidencia de la Generalitat con cuatro votos a favor, o si boicotean su investidura. En caso de que esta segunda opción contara con más apoyos, deberán decidir si rechazan la candidatura del e xconsejero de la Presidencia manteniendo las cuatro abstenciones o votando todos sus diputados en contra. En esta ocasión los antisistema no optarían por votar separados.

En su argumentación del «no», la CUP advierte que no hay «nuevos elementos» que justifiquen un cambio en el sentido de la dirección del voto de los anticapitalistas. «No podemos condicionar nuestro calendario y posicionamiento político a la acción represiva del Estado» , apuntan. Asimismo, recuerdan que los independentistas ya constataron en la anterior legislatura que los pasos para lograr la independencia tienen que hacerse desde Barcelona, ya que la ayuda externa, bien sea del Estado como de terceros países, es inexistente.

Los cupaires también recuerdan a sus militantes que Jordi Turull pertenece «orgánicamente» al PDECat y participó en la implementación de los recortes durante los gobiernos de Artur Mas , bestia negra de los antisistema. Finalmente, advierten que ni ERC ni JpC han mostrado voluntad de «ruptura» con el Estado a través de sus decisiones.

Sin embargo, la CUP también da algunos motivos para votar que sí. En primer lugar destacan que el procesamiento y posible encarcelamiento de Turull hacen que su investidura suponga un mensaje «de continuidad» del referéndum del 1-O. Con todo, el secretariado de la CUP concluye que del conjunto de las negociaciones desarrolladas no ven que haya «ninguna apuesta» por la acción política donde se encuentren «rupturas» que permitan «la construcción de la república ni políticas sociales profundas que reduzcan el sufrimiento de la clase trabajadora».