Un diputado de JpS alerta de una posible «trampa» para el independentismo en la estrategia de Colau

En una entrevista con Efe, Castellà ha reconocido que le «sorprendió» que el eje de la cumbre soberanista del pasado viernes en el Parlament fuera la defensa unitaria de un referéndum acordado con el Estado. «Nosotros desconocíamos absolutamente ese contenido», ha apuntado Castellà, que aun así ha reafirmado su adhesión al Pacto Nacional por el Referéndum, cuya constitución se solemnizó en la cumbre convocada por el presidente catalán, Carles Puigdemont, y a la que también se sumó la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

Castellà se ha mostrado de acuerdo con iniciar una campaña en busca de adhesiones nacionales e internacionales a un referéndum pactado, siempre y cuando eso no implique modificar «ni un milímetro» la hoja de ruta aprobada por el Parlament con los votos de JxSí y la CUP y que prevé un referéndum, con o sin el aval del Estado, como muy tarde en septiembre de 2017.

Según Castellà, esta búsqueda de apoyos a un referéndum pactado debe ir «en paralelo» a la campaña por el 'sí' que Demòcrates, escisión independentista de Unió, ya ha puesto en marcha.

«El referéndum lo vamos a convocar sí o sí», ha recalcado Castellà, para quien «sería un error gravísimo» desdecirse del plazo límite de septiembre de 2017 y esperar 'sine die' hasta que en España se dé otra correlación de fuerzas.

Castellà ha señalado los paralelismos que observa entre las tesis que defendía el exlíder de Unió Josep Antoni Duran Lleida y las advertencias que lanzan los 'comunes' en el sentido de que «el referéndum será pactado o no será».

«El discurso en defensa de una Cataluña soberana que pueda encajar en el marco plurinacional español y de un referéndum pactado es 'duranismo' en estado puro», ha constatado Castellà, que no se fía de las intenciones reales de las confluencias de izquierdas que integran a Podem, ICV, EUiA y la Barcelona en Comú de Ada Colau.

Según el diputado de JxSí, en las próximas semanas, cuando el Estado cierre la puerta a un acuerdo sobre el referéndum, se verá si los planteamientos de los 'comunes' son «sinceros y honestos» o esconden un interés partidista.

«Si lo que están planteando es que esperemos hasta que Podemos algún día tenga mayoría absoluta en España, esto sería una trampa, porque estarían utilizando el proceso catalán en interés propio. No sería ético instrumentalizar el anhelo de votar de los ciudadanos de Cataluña con el objetivo final de conseguir el poder en España», ha advertido.

Si la izquierda alternativa fuera capaz de conseguir que «el PP se moviese» y pactase un referéndum, Castellà sería «el primero en rectificar y decir que la suya era una buena estrategia», pero si el Gobierno de Mariano Rajoy sigue negándose a negociar, los «comunes» «deberán sumarse a la campaña por el sí o por el no» en el referéndum previsto para septiembre del año que viene.

A día de hoy, ha puntualizado, Colau y sus socios deben ser considerados unos «aliados» del independentismo, porque «no pueden decir 'no' a la radicalidad democrática» que implica un referéndum.

A pesar de que el discurso que articula Colau es «idéntico, calcado» al que abanderaba Duran desde Unió, Castellà se ha mostrado «convencido» de que la alcaldesa de Barcelona «tiene un núcleo de radicalidad democrática» que le impedirá «dar la espalda a la voluntad de la ciudadanía» en el referéndum que el Govern prevé convocar para el mes de septiembre que viene.