Barcelona, a la cabeza de las ciudades que impulsan la moda sostenible

A partir de allí, la iniciativa se extendió a lo largo del país. Y aún en los días que corren, la capital catalana continúa siendo sede de eventos que invitan a reflexionar sobre el rol social de la industria de la moda. De hecho, la ciudad se encuentra plagada de tiendas que albergan un concepto de la indumentaria muy por encima del mero negocio.

Corría el año 2014 cuando las circunstancias que llevaron a pensar en la posibilidad de un nuevo concepto de la indumentaria fueron públicas y trágicas. Apenas un año antes, el 24 de abril de 2013 se daba a conocer un hecho que conmovería a toda la prensa internacional: el derrumbe del edificio en Savar, un establecimiento de ocho pisos ubicado en un distrito ubicado en Daca, capital de Bangladés. El dramático episodio acabó con la vida de más de 1000 trabajadores de la industria textil, que se encontraban en condición de explotación.

Un año más tarde, nacía en la Ciudad Condal la asociación Moda Sostenible Barcelona, el primer evento del país que apostó por un concepto de diseño de indumentaria más humano, consciente, ecológico y -especialmente- ético. Esta entidad forma parte del movimiento internacional Fashion Revolution, que tiene sedes alrededor de todo el planeta. Su lema es claro y contundente: «Creemos en una industria de la moda que valore a la gente».

La mejor manera de advertir que la ciudad de Barcelona se ha ido convirtiendo en icono de la moda responsable es a través de un recorrido por las tiendas de la capital catalana que materializan el concepto de sostenibilidad.

Una de ellas lo dice todo con su nombre. Se trata de GreenLifeStyle, conocida como «La Boutique de ropa ecológica de Gracia» . Ubicado en el número 95 de la calle Torrent de L’Olla, el negocio se guía por dos principios básicos: la ética y el cuidado del medioambiente. Una de sus características es que sus dueños no se guían por la venta de ropa «por temporadas», como el resto del mercado, sino que apuestan a la moda duradera.

También la catalana CoShop se inclina por este tipo de diseños “ecológicos”. Desde el corazón del Barrio Gótico (puntualmente, calle Asturias 4), la firma hace una fuerte apuesta por prendas en las que los tejidos son naturales orgánicos, reciclables y sostenibles. Otras alternativas «verdes» para vestir en la Ciudad Condal son Ivori (Mirallers 7) y la tienda multimarca Velvet Barcelona (Verdi 42). 

Además de Barcelona, las tierras ibicencas también han logrado posicionarse dentro de España como un gran enclave para el diseño de sostenibilidad. De hecho, el pasado 27 de abril tuvo lugar allí el evento Natural Adlib, organizado por el Consejo de Ibiza, que consistió en la primera apuesta de orden público en el país en favor de una moda sostenible.

La iniciativa, que se llevó a cabo a finales del mes pasado en el Paseo de Vara del Rey, concentró diferentes propuestas de diseño de prendas con las siguientes características: creativas, orgánicas, sostenibles, ergonómicas y confeccionadas a mano.

Además de los desfiles, también se generaron otras actividades con el objetivo de fomentar la toma de conciencia en el mundo de la moda, tales como la charla «sostenibilidad en la moda: sé curioso, averigua, actúa», que tuvo lugar en Ibiza el pasado 23 de abril.

«En España cada vez más gente quiere usar ropa que respete el entorno natural. Aquí en Ibiza empezamos hace dos años celebrando el Fashion Revolution Day», cuenta en diálogo con ABC Marta Díaz, vicepresidenta segunda del Consejo de Ibiza y consejera de de Interior, Comercio, Industria y Relaciones Institucionales. A su vez, añade que «Barcelona siempre ha sido puntera también en moda y en todo lo que es más transgresor».

Estos y otros motivos son los que hacen que la ética y las pasarelas puedan combinarse en favor de un concepto de indumentaria más comprometido no solo son el medio ambiente, sino también con el cuidado de los trabajadores de la industria. En este punto, Díaz concluye que «es un concepto nuevo hablar de sostenibilidad en la moda”, pero advierte que “está cada vez más en auge».