La Generalitat acelera el despliegue territorial de la Agencia Tributaria catalana

El despliegue de la ATC en el conjunto de Cataluña es un paso más hacia la hacienda propia, ya que permitirá a la Generalitat ejercer plenamente las competencias tributarias en materia de recaudación ejecutiva y de gestión de los impuestos cedidos, según explica Efe.

Tras inaugurar la primera oficina, ubicada en el barrio de Poblenou y en la que trabajarán 28 personas, el vicepresidente y conseller de Economía ha asegurado que "el despliegue será a toda máquina y de máxima eficacia".

La primera oficina, que se abrirá al público el próximo lunes día 6, dará servicio al norte de la ciudad de Barcelona, Badalona, Sant Adrià de Besós y Santa Coloma de Gramenet. Junto con las otras 14 oficinas que se abrirán a partir del próximo 1 de septiembre, este espacio funcionará como punto de atención y prestación de servicios al contribuyente. Esta nueva red de oficinas se suman a las cuatro sedes que la ATC ya dispone en Barcelona, Girona, Lleida y Tarragona.

La funciones que asumirán estas oficinas son las de recaudación ejecutiva de los contribuyentes que tengan deudas pendientes con la administración (como pueden ser sanciones de tráfico) y la gestión directa de los impuestos cedidos (transmisiones patrimoniales, actos jurídicos documentados y sucesiones y donaciones), que ahora liquidan, además de la ATC, los registradores de la propiedad.

Las oficinas serán de alquiler y la Generalitat pagará por ellas un máximo de 550.000 euros al año, según la conselleria de Economía. Los contratos de alquiler están previstos para un período máximo de diez años, cinco de los cuales son obligatorios.

Además de esta red, la ATC también reforzará su presencia por Cataluña con doce puntos de atención y servicios tributarios, que se ubicarán en oficinas compartidas con las administraciones locales.