Colau, de nuevo sola ante una oposición que ya busca cómo destronarla

La jornada, arrancó, con una protesta a las puertas del Ayuntamiento de los restauradores , que de manera inaudita se concentraron para reclamar consenso para encontrar puntos de acuerdo en la nueva regulación y que no salgan perjudicados. Además, el pleno llegaba una semana después de que la aprobación del Plan de Actuación Municipal (PAM) fracasara por falta de apoyos y un día después de que el consistorio abordara llevar a votación las ordenanzas fiscales, un aplazamiento que también se debió a la solitud de Colau en este tema.

Ya durante la sesión, entre los pocos puntos del día, se descartó cesar al comisionado de la Memoria por la polémica muestra en el Born . La iniciativa de C’s solo contó con el apoyo de CiU y PP. Durante el debate, el teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, reconoció quu «posiblemente tendríamos que haber hecho las cosas de otra manera, aunque no considera que la exposición haya fracasado».

Por otro lado, se acordó crear un calendario para conmemorar los 25 años de los Juegos Olímpicos , una medida que también viene a reconocer la figura de Juan Antonio Samaranch, tras los recientes desprecios del equipo de Colau. En este caso, todos los grupos excepto la CUP votaron a favor de la medida planteada por el PP.

En medio de estas polémicas, CiU presentó una proposición para reprobar las actitudes y la manera de gobernar del gobierno bipartito de BComú y PSC, una medida que tiró adelante con los votos favorables de C’s, ERC y PP. Tras la votación, el edil convergente Joaquim Forn anunció que «abrirán conversaciones» con los grupos de la oposición para explorar la conformación de un mayoría amplia como alternativa al gobierno de Colau . Los grupos dePP y C’s ya habían barajado anteriormente la creación de una alternativa.

La propuesta de CiU pareció más factible, quizás por tratarse de la segunda fuerza municipal así como por el hecho de que ERC recogió rápidamente el guante y se mostró dispuesta a formar una alternativa . A la práctica, sin embargo, no parece tan fácil:las dos formaciones soberanistas juntan 15 ediles, los mismos que ahora tienen BComú y PSC.

Además, aunque CiU y ERC han compartido proposiciones y votos recientemente con C’s y PP –buen ejemplo de ello fue forzar a la una un pleno extraordinario sobre terrazas o presentar un manifiesto unitario sobre el tranvía– parece imposible que estas fuerzas puedan unirse por sus principios supramunicipales . Por otro lado, el improbable apoyo de la CUP a los soberanistas municipales –con tres ediles– tampoco conseguiría una mayoría para formar gobierno.