Chacón pierde fuelle en su batalla por el PSOE

Con una ventaja de 20 puntos y un millón de votos respecto al PP en Cataluña, Carme Chacón era la dirigente mejor situada del PSOE para salir con vida de las elecciones generales. Pero la debacle socialista se ha trasladado también a Cataluña, donde los socialistas han perdido 18,6 puntos y diez escaños y, lo que es más importante, han dejado de ser la fuerza más votada en las generales a favor de CiU —una circunstancia que no se había producido desde la recuperación de la democracia—. Cataluña fue ayer la comunidad en la que más cayó el socialismo.

Pese a ello, Chacón no se da por vencida. «No estamos derrotados porque no nos rendiremos por un resultado adverso; nos sobrepondremos y sabremos comparecer a la cita con el futuro» advirtió la dirigente catalana con la vista puesta ya en el congreso ordinario anunciado momentos antes por Alfredo Pérez Rubalcaba. Los responsables del PSC habían advertido horas antes, cuando los sondeos les daban la victoria en Cataluña, que Chacón sólo comparecería ante la prensa tras oír a Rubalcaba. Y así fue.

El PSC obtuvo ayer 15 escaños en Cataluña, dos menos que CiU y apenas tres más que el PP, al que en 2008 aventajó en 17 diputados. Cataluña sigue resistiéndose al PP, pero ha dejado de ser un bastión del PSOE y ya no determina las mayorías a favor de los socialistas.

La principal caída se produjo en Barcelona, dónde los socialistas se quedaron con 10 escaños, frente a los 16 de 2008. Pero igualmente dolorosa ha sido la pérdida de un escaño en Lleida y Girona y dos en Tarragona. Si hace cuatro años el PSC era la primera fuerza en las cuatro circunscripciones catalanas, ahora sólo gana en Barcelona y por un escaño.

A las ocho y cuarto de la tarde el portavoz y viceprimer secretario del PSC, Miquel Iceta, se apresuró a hacer las primeras valoraciones de una jornada electoral especialmente difícil para los socialistas para aceptar en base a las encuestas que el PP había ganado las elecciones y los votantes habían propinado una sonora derrota a los socialistas. Entonces todavía confiaba en que el PSC resistiera en Cataluña y con él las expectativas de Chacón a liderar el PSOE.