Un sargento de los Mossos, imputado por la lesión ocular a una joven en los disturbios por Hásel

Así lo ha comunicado este miércoles el Juzgado de Instrucción 1 de Barcelona , tras la declaración del jefe de la Brigada Móvil, Xavier Pastor, quien firma el protocolo operativo de utilización de lanzadoras de foam, por uno de cuyos proyectiles habría resultado lesionada la chica.

La abogada de Irídia, Anaïs Franquesa , que ejerce como acusación popular en la causa, ha celebrado la decisión del juez, ya que en un primer momento se le citó a declarar en la fase de instrucción como testigo y no como investigado.

Por su parte, el abogado que ejerce como acusación particular, Xavier Muñoz, ha expresado que en la causa «hay circunstancias que se tienen que esclarecer para ver si hay más responsabilidades», como el hecho de que el protocolo de uso de las lanzadoras autorice a disparar a distancias menores de las que sale en las instrucciones de los fabricantes de las armas.

Asimismo, los abogados han explicado que Pastor, durante su declaración, ha asegurado que las lanzadoras no son armas de precisión, «hecho que contradice lo que dijeron de que el foam es muy preciso». El jefe de la Brimo también se ha ratificado como el máximo responsable de las instrucciones que se dan en este protocolo, que establece que las armas se pueden disparar a 20 metros como distancias mínima .

«Nosotros consideramos que el fabricante de las instrucciones de este arma no contemplan el mismo criterio. Queremos que nos expliquen el criterio de por qué se permite una distancia inferior», han añadido los letrados.