El Paralelo, espectáculo y modernidad

La exhibición comisariada por el director escénico del CCCB, Xavier Albertí y el periodista Eduard Molner abrirá sus puertas el próximo 26 de octubre y se prolongará hasta el 23 de febrero.

La aparición de edificaciones efímeras y la conversión de esta calle en un área de espectáculo ininterrumpido darán lugar a la penetración de nuevos géneros foráneos que rápidamente serán instaurados como propios debido a la gran demanda de su público. El cabaré, el cuplé, el vodevil, la zarzuela, el circo y el teatro político, entre otros, recibirán el nombre de artes menores y su contenido basado en el dramatismo social y la exaltación de la figura femenina provocarán un cambio en los estándares de la moral tradicional. El Paralelo será conocido popularmente como el «mercado del sexo o la ciudad burdel».

Este nuevo código de valores caracterizados por su tolerancia, también fomentará la manifestación de las ideologías más radicales, convirtiendo la avenida en un punto de confluencia política, sede de las organizaciones sindicales, anarquistas y republicanas.

La retrospectiva se estructura en torno a un recorrido de catorce ámbitos; partiendo de la frontera preexistente a la edificación de la avenida, el fracaso urbanístico de la realidad social y la ciudad burdel, entre otros, hasta culminar con el fin de la Guerra Civil. La llegada de la dictadura franquista será la causa detonante que obligará a clausurar los establecimientos de ocio y dejará caer en el olvido la atmósfera tan singular y única que había conquistado el eje Nou de la Rambla-Paralelo.

Las artes plásticas representan una parte fundamental de la exposición. El universo del Distrito V queda reflejado en la producción catalana de Isidre Nonell y Ricard Opisso, que fueron los primeros artistas en retratar el Paralelo y su área de influencia. Aún así, un larga lista de personalidades inspiran sus obras en la atmósfera del zona, es por ello que la retrospectiva recoge las obras de Pablo Picasso y su «Blanquita Suárez», célebre cantante de la época, muy admirada por el pintor. También se encuentran las pinceladas del ecléctico pintor español Francisco Domingo, las influencias parisinas de Ricard Canals, el cubismo de Rafael Barradas, Emili Bosch y Gabriel Casas, entre otros.

Todo el entorno plástico queda enmarcado por un montaje escenográfico diseñado por Emiliana Design Estudio, con el que se propone recuperar todo tipo de materiales nostálgicos de la época como son fotografías, audiovisuales, grabaciones, folletos, carteles, atrezzo y vestuario utilizado por las vedettes y bailarinas.