Los Mossos detendrán a Forcadell y Puigdemont si lo ordena un juez

El máximo responsable de los Mossos, con una larga trayectoria política que empezó en el PSC y que le ha llevado ahora a estar dentro del gobierno soberanista, fue preguntado por la posibilidad de tener que actuar para detener a algún cargo político por cuestiones judiciales, a lo que respondió que «los Mossos tienen que cumplir en todo momento con la legalidad vigente ». Batlle recordó, en un primer momento con un tono informativo, que los agentes tiene una doble función como policía dependiente del departamento de Interior y también como cuerpo de actuación si la Fiscalía o los jueces lo requieren. «Hemos cumplido esta función y la seguiremos cumpliendo», continuó Batlle.

El presentador quiso incidir en el hipotético caso de que se tuviera que actuar con los responsables de la Generalitat o, muy especialmente, el Parlament de Cataluña, cuya presidenta, Carme Forcadell , está siendo investigada por haber permitido tirar adelante desde la Cámara catalana las leyes de desconexión.

« Es un caso que no nos planteamos », le espetó al conductor del programa. Acto seguido, sin embargo, Batlle recordó que recientemente ha habido ejemplos de «requerimientos que no han sido cumplidos por cargos públicos y los juzgados nos han requerido para que garantizáramos que una determinada persona se personase ante una instancia judicial y se ha hecho».

El jefe de los Mossos se refirió implícitamente a los recientes casos del concejal de la CUP en Vic que tenía que acudir a declarar en la Audiencia Nacional por una polémica frase o la alcaldesa de Berga, también de la CUP, por negarse a descolgar una bandera independentista de la fachada del consistorio. Al momento, recordó que recientes casos que no mencionó habían sido excepciones.

Ésta no es la única polémica del jefe de los Mossos de esta semana. Según se conoció hace tres días, Batlle deberá comparecer en el Parlament para informar de cómo se gestionó la detención de un conductor que arrolló a un agente y le dejó en coma en Rubí (Barcelona) el pasado 15 de diciembre. El hombre quedó en libertad a la espera de una citación judicial, algo que indignó a la plantilla.