Indultos no, justicia y convivencia sí

Teniendo en cuenta esto, es un tema que debemos abordar con mucha responsabilidad y sin perder la cabeza. Es difícil entender un indulto, sea cual sea, si el condenado repite una y otra vez que lo volverá a hacer. Tampoco hay arrepentimiento y el Tribunal Supremo ha considerado que no hay razones de justicia, equidad o utilidad pública para conceder los indultos. Con eso encima de la mesa, es lógico pensar que lo que hará Pedro Sánchez es blindar su continuidad en la presidencia del Gobierno y contentar a los partidos separatistas que le dieron apoyo en la moción de censura.

En todo este debate, debemos dejar a la sociedad civil que se exprese en las calles, creo que los partidos políticos deben apoyar, pero no liderar, un movimiento en contra de los indultos. Siempre he creído en el pensamiento transversal del constitucionalismo en Cataluña, siempre poco valorado, y ahora creo firmemente que debe ser la gente la pase por delante de las siglas.

Los indultos no podrían ser una solución cuando es evidente que volverán a intentar romper el orden constitucional. Lo que no puede pasar bajo ningún concepto es generar un problema mayor, incrementar el desapego del ciudadano hacia la política y perpetuar un problema que solo ha generado división, enfrentamiento entre familias, fuga de empresas y pérdida de reputación internacional. Indultos no, justicia y convivencia sí.