Mas quiere someter el pacto fiscal a referéndum

El objetivo de CiU es soslayar la autorización que, según la Constitución, debe dar el Gobierno o el Congreso cuando se organizan referendos. Por ello, está previsto que la Generalitat apruebe en diciembre un proyecto ley de consultas populares. En el último debate de política general celebrado en el Parlamento autonómico, CiU y ERC pactaron una resolución en la que se instaba al ejecutivo catalán a aprobar esa nueva normativa. «Parece que el PP quiere olvidarse del pacto fiscal, quieren dejarlo para no sé cuándo. Si esto sucede, nosotros no nos quedaremos de brazos; el Govern liderará la reivindicación convocando una consulta popular», aseguró Homs en una entrevista en TV3. El nacionalista es consciente de que la presión sobre los populares tiene poco recorrido, dada la mayoría absoluta obtenida por el PP en las elecciones generales, pero se preguntó: «¿Se puede gobernar España en contra de Cataluña? Ellos sabrán».

Mucho más posibilista se mostró el cabeza de lista de CiU en las generales, Josep Duran Lleida, quien antes de pensar en referendos, prefiere esperar a que se constituya el nuevo Gobierno. «Tenemos un trabajo que hacer en Cataluña, y otro en Madrid. El nuestro es intentar negociar políticamente para conseguir el pacto fiscal. No está en nuestras manos convocar una consulta, y sí presentar los proyectos de ley que sean necesarios para que sea posible», dijo.

La líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, reprochó a CiU que amague con un referéndum «que no se producirá», mientras que el portavoz de Ciudadanos, Jordi Cañas, alertó de que llevará al gobierno catalán a los tribunales si se llevan a cabo iniciativas que usan «la xenofobia fiscal para enfrentar territorios». ERC no sólo avala la iniciativa sino que la pone como condición para pactar los futuros presupuestos de la Generalitat de Cataluña.