Los funcionarios catalanes de prisiones endurecen sus protestas por los recortes
En la cárcel de Quatre Camins se mantiene un bloqueo que deja a la quincena de funcionarios del turno de noche al cargo de todos los reclusos
JANOT GUIL
Los funcionarios de prisiones de la Generalitat han vuelto hoy a la carga en el conflicto que mantienen con la Generalitat por los recortes en sus condiciones laborales que quiere aplicar el ejecutivo de Artur Mas y por la falta de seguridad en las cárceles.
Ayer, una decena de delegados sindicales decidió encerrarse en la sede de la Dirección General de Servicios Penitenciarios, en la calle Aragó de Barcelona, tras romper las negociaciones con los representantes de la administración. Han pasado allí toda la noche. Y desde primera hora de la mañana, decenas de funcionarios han llevado a cabo concentraciones a la entrada de varias cárceles --Can Brians I y II, en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), y en Quatre Camins, en la Roca del Vallés (Barcelona)-y , después de que algunos trabajadores del turno de tarde de ayer decidieran pasar la noche encerrados en todos los penales de Cataluña.
Las protestas han entorpecido la entrada de los trabajadores del turno de mañana, que debían incorporarse a las 7:30 horas. En el caso de Can Brians I y II, tras una asamblea, los funcionarios concentrados han dejado vía libre a la entrada de sus compañeros. En Quatre Camins, sin embargo, el bloqueo se mantiene de momento, lo que deja a la quincena de funcionarios del turno de noche al cargo de todos los reclusos.
Recorte del 25%
Por su parte, los sindicatos -UGT, CC.OO., CATAC y CSI-F-, están convocando a los funcionarios de las cárceles de toda Cataluña a que acudan esta mañana ante la sede de la Dirección General de Servicios Penitenciarios para apoyar a los delegados allí encerrados y para forzar a la administración a retomar las negociaciones con una predisposición a rebajar sus pretensiones iniciales. Por ahora, un centenar de ellos ya se han dado cita allí, mientras siguen llegando compañeros suyos de las cárceles de Lérida, Tarragona, Girona y de las de Barcelona.
Los funcionarios de prisiones denuncian que el recorte que quiere aplicarles la Generalitat es más gravoso que el planteado para el resto de trabajadores de la función pública. Supone una disminución de un 25% de su salario y la supresión de algunos derechos adquiridos.
En el caso de los funcionarios de prisiones, la negociación de los recortes comunes a todos los trabajadores de la administración catalana ha coincidido con el vencimiento del convenio de servicios penitenciarios, acordado en 2006. El convenio, que venció el pasado 31 de diciembre, está prorrogado, aunque según denuncia a ABC la portavoz de CC.OO., Cristina Mérida, "la administración quiere incluir los recortes en este convenio prorrogado, en vez dejarlo tal cual hasta que se negocie uno nuevo".
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