Cataluña perdería un 20,15% del PIB y uno de cada seis empleos con la independencia

El informe, presentado hoy, subraya la elevada dedependencia comercial de las empresas catalanas con las del resto del territorio español y advierte de que Cataluña perdería una cuarta parte de su riqueza anual si triunfa un proceso secesionista.

En base a las estadísticas sobre flujo comercial más recientes, relativas a 2010, las empresas catalanas vendieron más bienes y servicios al resto de España (por importe de 66.304 millones de euros) que a los restantes 186 países del mundo (64.325 millones). El estudio constata, por ejemplo, que Cataluña vende más a Murcia que a Estados Unidos, que tiene mayor flujo comercial con Aragón que con Alemania o con Andalucía respecto a Italia.

En base a todas estas premisas, el coste económico de la independencia representaría una caída del 20,15% del PIB. En términos per cápita la renta anual caería aproximadamente unos 5.600 euros por cada habitante de la comunidad, quedando por debajo de la del resto de España. En su análisis, CCC advierte de las consecuencias del denominado efecto frontera tanto en los ingresos como en el empleo. En este sentido vaticina una caída del 50% en las relaciones comerciales entre España y Cataluña así como una ola de deslocalizaciones que provocaría una importante pérdida de empleo. Uno de cada seis empleos estaría en riesgo.

Francisco Caja, presidente de CCC, acusó a los partidos catalanes soberanistas de maquillar la realidad tras una hipotética secesión y recordó que actualmente Cataluña tiene un saldo comercial positivo con el resto de España por importe de 21.937 millones de euros frente a un déficit comercial con el resto del mundo que asciende a menos 18.329 millones de euros.

"Solo como anécdota nos hemos tomado la molestia de analizar la balanza comercial de Cataluña con Rusia, y hemos visto que el déficit asciende a 600 millones, es decir, Cataluña vende a Rusia 655 y le compra a Rusia pro avlro de 1.200 millones", recuerda Caja, que añade que es importante recordar que ello implica que las empresas catalanas venden tres veces menos a Rusia que a Murcia, un mercado que, por el contrario, la Generalitat no se esmera tanto en cultivar.

El informe de CCC concluye también que el supuesto déficit fiscal catalán no existe, sino que Cataluña tiene un saldo positivo de 4.015 millones de euros.