SPECTATOR IN BARCINO
El velo de Maya populista
Según el hinduismo, Maya designa la irrealidad. En Cataluña llevamos demasiado tiempo con el velo de Maya. El ilusionismo populista
Laporta y compañía (más que un club)
Sostienen mis amigos que no viven en el Eixample que cuando acaben las obras de los ejes verdes celebraremos el paseo y olvidaremos las críticas. ¿Quién se atreverá a revertir lo ya hecho? Es cierto. Como que la circulación expulsada de Consell de Cent ... se derivará a Valencia y Gran Vía: el medio millón de coches que entran diariamente en Barcelona no desaparece por ensalmo. Ada Colau no es David Copperfield.
La revista del RACC recoge un sondeo sobre la convivencia de la movilidad en Barcelona: 25.000 observaciones y 2.000 encuestas. Para el 66 por ciento de encuestados, los peatones, ciclistas, patinetes, motos y coches no pueden convivir en un mismo espacio. En cuanto a la denominada «pacificación» de calles (plataforma única o zonas con velocidad máxima de 30 kilómetros/hora) más de la mitad considera que no mejora la convivencia.
El informe se completa con una conversación del presidente del RACC, Josep Mateu, con los doctores Bonaventura Clotet y Antoni Trilla. Ambos contradicen la propaganda de este consistorio que utiliza a los barceloneses como cobayas para su laboratorio eco-comunista. Los patinetes eléctricos, observa Clotet, «reducen mucho la movilidad física de las personas jóvenes, y tenemos un porcentaje de obesidad infantil y juvenil muy elevado». Trilla ratifica el diagnóstico. Trasladarse en patinete es la antítesis del ejercicio saludable de caminar: «Si la gente joven no se mueve de manera activa, con el tiempo tendrá más riesgo de padecer sobrepeso».
Círculo del Liceo, la obra de arte de la sociedad civil
La entidad barcelonesa, el club privado más antiguo de España, celebra sus 175 años y participa con una obra de Ramón Casas en una exposición de la National Gallery de Londres
La contaminación es otro argumento del urbanismo táctico: «Atribuir las muertes a la contaminación como único factor es difícil. Como factor contribuyente es más factible», matiza Clotet. «Los baremos de la contaminación como riesgo para la salud dependen de quien loe establece», advierte Trilla. La OMS es más estricta que la UE: «En Barcelona incumplimos casi todos los baremos de la OMS… Con los niveles de la UE no estamos mal del todo», añade.
Patinetes y bicicletas suponen un riesgo para una población envejecida, alerta Clotet: «Algunos ciclistas no paran nunca y si se encuentran con un semáforo rojo, se lo saltan. Veo patinetes que circulan a una velocidad excesiva y por donde quieren», corrobora Trilla.
Las «superislas» tampoco entusiasman a ambos médicos: «Están construidas a base de opiniones, pero no tenemos la certeza de que, una vez realizadas aporten mejoras a todo el mundo», opina Trilla. Clotet comparte esas dudas.
¿Y la ampliación del Prat? Si queremos que Barcelona sea un destino para la investigación biomédica habrá que adecuar el aeropuerto, afirma Clotet. «Si no tenemos una buena conexión internacional, siempre seremos plato de segunda elección», remacha Trilla.
Leo estas opiniones y la querella de Josep Antoni Acebillo, arquitecto jefe con Pasqual Maragall y Joan Clos, contra Ada Colau y Janet Sanz por delito urbanístico y malversación. Hace poco la fiscalía archivó la otra querella que interpuso la entidad Salvem Barcelona del fallecido Francesc Granell y Jacint Soler Padró. Los abogados Francesc Jufresa y Ferran Grasas reclaman la paralización cautelar de las «superislas» para «evitar la plena consumación» de unos delitos que podrían sumar más de 100 millones de euros en concepto de perjuicios.
Los delitos: «Una manifiesta infracción normativa de la ley del suelo que puede tener efectos devastadores», para particulares y comercios. Y «problemas de accesibilidad a los propios domicilios de servicios básicos».
La querella se amplía a los integrantes de la comisión de gobierno del Ayuntamiento que el 26 de mayo de 2022 votaron a favor de los ejes verdes del Eixample. También a los funcionarios que aportaron informes técnicos favorables a las superislas sin la preceptiva modificación del Plan General Metropolitano (PGM): «Se están transformando sustancialmente, por no decir eliminando, unas vías públicas esenciales de la ciudad».
La banda del «sí-se-puede» ilustra la estrategia del comunismo que se disfraza de ecologista o feminista. Mientras Colau cultiva el urbanismo despótico, el negativismo ante la iniciativa privada y el antisemitismo por decreto, sus colegas del gobierno Sánchez ha fracturado el movimiento feminista.
En el Círculo del Liceo, la escritora Carmen Posadas y Eugenia Bieto, directora general de ESADE de 2010 a 2018, coinciden en que el feminismo de Podemos es «absolutamente dañino para las mujeres». Un feminismo «empeñado en feminizarlo todo hasta el absurdo».
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Posadas menciona la feminización del Calendario que propuso la universidad de Granada: enera, febrera... Según la ocurrencia, Colau inaugurará sus ejes verdes en Maya. Según el hinduismo, Maya designa la irrealidad. En Cataluña llevamos demasiado tiempo con el velo de Maya. El ilusionismo populista.
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