Reclaman 500 euros por la «limpieza» de la vía al motorista de Barcelona que murió arrollado por un turismo en Galicia
Fue en agosto de 2020 cuando un coche embistió a Josep Boan, que circulaba a escasos metros de su padre por la AC-442. La sentencia condenó al conductor por homicidio imprudente
«¿La vida de mi hijo vale menos que un contenedor quemado?»
La Diputación de La Coruña reclama casi 500 euros a la familia Boan por la limpieza de la vía y la actuación de los bomberos tras el siniestro que causó la muerte de su hijo Josep, el joven barcelonés de 20 años ... que en agosto de 2020 viajaba en moto por la AC-442, a escasos metros de su padre, cuando un turismo se lo llevó por delante, tras tomar una curva al menos a 116 km/h, cuando la velocidad estaba limitada a 70. El conductor, que ignoró tres señales de tráfico, invadió el carril contrario, tal y como consideró probado la sentencia que lo condenó a dos años de cárcel por homicidio imprudente, aunque no llegó a ingresar en prisión.
Este lunes, 9 de octubre, más de tres años después del suceso que acabó con la vida de Josep, su madre Pilar ha recibido en casa la notificación, a nombre de su hijo, que le reclama el pago de 485,50 euros antes de que finalice el año. El concepto que indica el recibo es «asistencia y limpieza de vía tras el accidente entre vehículo y moto», que duró más de tres horas. También por la intervención de los bomberos.
«¿La vida de mi hijo vale menos que un contenedor quemado?»
La madre de Josep Boan reclama endurecer las penas contra los homicidas en siniestros de tráfico
Una notificación «automatizada», reza el propio documento, que aumenta aún más el sufrimiento de la familia Boan Rosanes. Desde que aquel conductor arrollase a Josep, Pilar convirtió la siniestralidad vial en su caballo de batalla para conseguir modificar el Código Penal y endurecer las penas contra los homicidas en siniestros de tráfico. También para concienciar sobre los peligros de la carretera y el tratamiento informativo a la hora de hablar de las víctimas.
En el juicio, el homicida de Josep «dijo que se le había cruzado un animal en la carretera y que tuvo que dar un golpe de volante. Es enfermero, y ni si quiera salió corriendo a ayudarlo», explicó a este diario la progenitora, hace unos meses. Nunca se ha puesto en contacto con la familia. «Él hace su vida, pero mi hijo no volvió a casa. Ni si quiera le han impuesto una sanción económica. Yo no pido que pase toda la vida en prisión, pero lo que ha hecho ha quedado sin consecuencias, mientras nuestra familia ha quedado destrozada», razonaba entonces.
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