Un guardia civil acepta 15 meses de prisión por difundir 'fake news' sobre menores extranjeros
primera condena en españa
El primer juicio en España por difundir noticias falsas para difamar a colectivos vulnerables se salda con un acuerdo de conformidad
Piden dos años de cárcel por difundir 'fakes news' xenófobas sobre menores extranjeros
El tuitero acusado durante la vista en la Audiencia de Barcelona este martes
Pretendía «difamar de forma global e injusta a todos los menores no acompañados procedentes de otros países», contribuyendo así a «despertar o aumentar entre la población los prejuicios y estereotipos contra este colectivo de personas, especialmente vulnerables, con el consiguiente riesgo de generar ... sentimientos de rechazo y hostilidad social frente a ellos». Así lo manifestó la Fiscalía en su escrito de acusación contra J.J.M.F., guardia civil que este martes ha aceptado 15 meses de cárcel por difundir información falsa sobre los menores inmigrantes a través de redes sociales, en una condena pionera en España.
Al carecer de antecedes, y ser una peña inferior a dos años, el fiscal ha pedido la suspensión de su entrada en prisión, aunque dicha decisión deberá tomarla el tribunal. Sí tendrá que abonar una multa de 1.620 euros, así como afrontar una inhabilitación de cinco años para profesión o oficio educativos, y también tendrá que cerrar sus perfiles en redes sociales, bajo la prohibición de abrir otros en los que vuelva a compartir contenido discriminatorio. Un acuerdo de conformidad al que ha llegado durante la vista oral, esta mañana, en la Audiencia de Barcelona, que incluye la realización de un curso de igualdad de trato y no discriminación.
Fue en 2019 cuando, a través de un perfil de la red social, el individuo compartió las imágenes de la agresión de un hombre a una mujer en China, pero lo acompañó con el siguiente texto: «Aquí tenéis el vídeo del mena marroquí de Canet de Mar (Barcelona), a esos que les vamos a dar la paguita hasta los 23 años. Por cierto, luego para más INRI la viola. Estas manadas de marroquís no saldrán en los medios».
El hombre pretendió así vincular una supuesta agresión sexual perpetrada por menores en el citado municipio catalán mediante informaciones «deformadas y/o falsas sobre los inmigrantes en general, todas ellas presididas por idéntico rechazo frontal a la presencia de extranjeros en España». Así lo consideró el Ministerio público, y ahora el tuitero ha asumido un año y tres meses de cárcel por ello, frente a la pena de dos años que el fiscal solicitó para él en inicio.
El vídeo que compartió, que obtuvo casi 22.000 visualizaciones, muestra una brutal paliza de un hombre a una mujer: 15 puñetazos en la cabeza, varias patadas, hasta que la víctima queda inconsciente. Tras ello, el atacante le intenta bajar los pantalones, la agarra por el pelo para arrastrarla por el suelo hasta que ambos desaparecen del campo visual de la cámara de vigilancia que captó los hechos.
Es una grabación de junio de 2019, que las autoridades chinas difundieron para tratar de localizar al autor mediante la colaboración ciudadana, pero el acusado la compartió asegurando que el agresor era un menor extranjero. Pero esta no fue la única publicación de carácter xenófobo en sus redes sociales.
Supremacismo blanco
A través de su perfil, 'castigadorbruce', publicó otros vídeos en los que acusaba a inmigrantes de perpetrar violaciones, acompañados de expresiones como «hijos de la gran puta»; «moros de mierda», llegando a usar una de las frases más conocidas del líder del movimiento supremacista blanco Ku Kux Klan: «Debemos asegurar la existencia de nuestra raza y un futuro para los niños blancos».
Por todo ello la Fiscalía le acusó de un delito contra el ejercicio de los derechos fundamentales y las libertades públicas, en su modalidad de lesión de la dignidad de las personas por motivos discriminatorios, por el que ahora ha sido condenado, tras llegar a un acuerdo de conformidad. Éste ha sido el primer juicio celebrado en España por difundir noticias falsas para difamar a colectivos vulnerables.
Tras conocer la condena, el Instituto Armado ha abierto un expediente al agente, destinado en la Comandancia de Barcelona. Según trasladan fuentes del cuerpo a ABC, dicho expediente se resolverá cuando la Audiencia notifique la sentencia a la Guardia Civil, y será entonces cuando se tomarán las «medidas disciplinarias pertinentes».
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