Fernando Alonso se cuela en el Parlament de Cataluña: «Queremos que la 33 se produzca en Montmeló»

En el contexto político que se vive, era muy jugoso que este debate llegara a la contienda de la Generalitat de Cataluña, y en este caso ha sido Carlos Carrizosa, el líder de Ciudadanos en el Parlament, el que ha sacado la situación de Montmeló a colación en el Pleno.

Carrizosa, en nombre de Ciudadanos, ha interpelado a Pere Aragonés por la gestión de su gobierno sobre el Circuit, que depende de los estamentos públicos. De hecho, es Roger Torrent, conseller de Empresa y Trabajo, quien ostenta la responsabilidad de todo lo que ocurra en el conocido trazado barcelonés en calidad de su presidente.

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«Lo que han hecho ustedes hasta ahora ha sido boicotear el Gran Premio en Cataluña», afeó Carrizosa a Aragonés. «Primero, el ayuntamiento de Barcelona retiró toda la inversión. Segundo, ustedes han pasado absolutamente de hacer las reformas pertinentes en el Circuito de Montmeló. Y está aquí el señor Torrent, sentado tranquilamente a su lado. Es el presidente del circuito y es el máximo responsable de que no se hayan hecho las reformas pertinentes», insistió Carrizosa.

Por último, le insistió en señalarles, a todos en general, por la pelea a ver quién no quería aportar dinero para ayudar a la supervivencia del Circuit de Barcelona-Catalunya. «En cambio, tenemos en otro lado a Madrid y otras ciudades del mundo que están pidiendo a la Fórmula 1 que vayan allí, que quieren el dinero que supone que vaya el Gran Premio allí», critica.

En el discurso, Carrizosa hizo que Aragonés soltara alguna sonrisa socarrona, mientras él seguía relatando cómo están dejando caer Montmeló como un lugar atractivo para el 'Gran Circo'.

«Yo le pido señor Aragonés que apueste por el GP de Fórmula 1. Es una apuesta clarísima. Lo que la administración invierta en pagar el canon, se retorna multiplicado por 5: si usted invierte 100, le devuelven 500. Es bastante fácil de entender para cualquiera que tenga mentalidad de riqueza», le interpeló Carrizosa, antes de dejar alusiones puramente deportivas.

«Si esto fuera el Barça-Madrid, el Madrid ya nos habría metido otro gol. Déjense de su habitual inacción, de su parálisis que tantas oportunidades nos está haciendo perder a los catalanes. Menos 'procés' y más decisiones responsables. Pónganse a trabajar de una vez», le pidió, antes de dejar el gran titular de su intervención, que provocó las sonrisas en todas las bancadas.

«Si Ciudatans gobernara, el Gran Premio de Cataluña (n.d.r.: este no existe de momento en Fórmula 1) se quedaría en Cataluña. Nosotros queremos que la victoria 33 de Fernando Alonso pueda hacerse aquí en el Circuito de Montmeló de Cataluña», finalizó.

Mientras tanto, y pese a que tanto Stefano Domenicali (CEO de la Fórmula 1) como las autoridades han tenido muy presentes a Fernando Alonso en la cuestión de la llegada de la Fórmula 1 a Madrid, el asturiano ha guardado un comentado silencio.

Sobre la aportación del ayuntamiento de Barcelona a la supervivencia de Montmeló en el calendario de Fórmula 1, la responsable de la eliminación fue Ada Colau. La exedil de la ciudad condal asumió desde el principio de su mandato recortar el apoyo económico para la supervivencia de Montmeló, algo clave ya que para la organización de un Gran Premio de Fórmula 1 se requiere del pago de una cuota, un canon, que se sitúa en unos 25 millones de euros. Solo con las entradas y aunque el circuito se llenara (que en los últimos años no fue así), el beneficio era casi imposible.

En cuanto a las reformas, aunque se emprendieron en parte (se cambió la chicane final para recuperar la antigua curva larga antes de meta), no llegaron a ser todo lo ambiciosas que hubieran deseado desde una Fórmula 1 en movimientos.

Paralelamente, además, desde Liberty Media (dueños de los derechos de la Fórmula 1) no han asumido con buenos ojos el uso partidista del GP de España como un foco de los intereses independentistas. De hecho, la cita de Montmeló lleva asumiendo como algo normal lo que en el resto de carreras es una anomalía: es el único Gran Premio donde se interpretan dos himnos antes de la carrera. Y es que desde hace años suena 'Els segadors', el himno oficioso catalán, y la 'Marcha Real', el himno oficial español.

En un contexto de aumento de carreras en el calendario y con muchas ciudades pujando por entrar en el calendario, tanto en Europa como sobre todo fuera, todos estos ingredientes no han ayudado para que Barcelona se mantenga como un lugar idóneo para la Fórmula 1. De hecho, ya ni siquiera se celebran allí los test de pretemporada, pese a que para los ingenieros y pilotos era un lugar óptimo por las características del circuito.