La mafia marsellesa cruza la frontera con una doble ejecución en Tarragona

Era un coche que alguien había alquilado en Marsella (Francia) y que luego habían robado. En su interior, los investigadores localizaron, no sólo el AK-47, sino también dos armas cortas y dos granadas de mano, «en buen estado». Las víctimas eran Omar, de 28 años, y Nadir, de 25. El primero había huido de territorio galo hacía unos meses, antes de enfrentarse a un juicio por homicidio. El segundo, un amigo suyo, que había ido a visitarlo. Ambos eran integrantes del clan Yoda, y fueron ajusticiados por una banda rival: la DZ Mafia. La doble ejecución respondía a la guerra entre bandas por el control del tráfico de drogas en Marsella.

La resolución del crimen, este enero, se ha saldado con la detención de 13 personas, incluidos los otros dos ocupantes del coche desde donde dispararon a las víctimas. Algunos de ellos ya se encontraban en prisión, desde donde daban, igualmente, órdenes, a sus respectivos subordinados. Ocho de los arrestados son mujeres, aunque cuatro han quedado ya en libertad, investigadas por «haber pasado información» a la DZ Mafia.

Pero el balance más importante de esta operación, bautizada como caso Pamer, es que las pesquisas conjuntas de la Policía catalana y las autoridades francesas se han traducido en cero homicidios entre integrantes de ambos clanes, entre noviembre y enero de 2024, según detalló ayer el fiscal marsellés, Nicolas Bessone. «No digo que hayamos ganado la guerra y todo haya acabado, pero por el momento estamos satisfechos», apuntó.

Y es que sólo durante los primeros diez meses del año pasado, la ciudad –la segunda más poblada de Francia, por detrás de París– registró 63 asesinatos. La mayoría de detenidos por los mismos tenía «algún vínculo» con el crimen organizado.

La doble ejecución en Tarragona, según han constatado los investigadores, se debió a una «traición». Omar, tras su fuga, llevaba un tiempo afincado en la costa mediterránea. Salou fue su último escondite. «Cataluña, por distancia, es una zona de refugio para el sur de Francia», apuntó el intendente Joan Carles Granja, «no sólo para quienes huyen de la Justicia sino también de otras bandas criminales».

En este caso, la poca discreción de Omar –compartiendo imágenes en redes sociales– no ayudó. Por eso, la DZ Mafia aprovechó la oportunidad y la «vulnerabilidad de las víctimas fuera de su zona de seguridad», precisó el subjefe de la Comisaría General de Investigación Criminal de los Mossos. Fue una 'scort' la que avisó a sus ejecutores. Junto a varias amigas, se alojaba en el mismo hotel. Pero fue ella, han podido constatar los agentes, quien dio «luz verde» al doble crimen. Se encontraba en la parte trasera del coche, pero, antes de que los tiroteasen, abandonó el vehículo y se refugió en el alojamiento. Fue quien los «traicionó», precisan fuentes de la investigación.

«Es la primera vez que vemos que la mafia marsellesa traspasa las fronteras y viaja a otro país para cometer un crimen», apuntó el fiscal sobre el doble asesinato de Salou. Por su parte, el jefe de la investigación en Tarragona, Francesc Moragas, precisa la magnitud de lo ocurrido: una ejecución en una zona turística, poco antes de las once de la noche, y con un arma de guerra. Tardaron apenas 90 segundos en vaciar el cargador del AK-47 y huir. Los Mossos recogieron en la zona 35 cartuchos percutidos. «Nos inquieta muchísimo, esperemos que se trate de un hecho puntual», precisó ayer desde Marsella, durante la rueda de prensa para detallar los resultados de las pesquisas.

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Han sido ocho meses de investigación, bajo la tutela del Juzgado de Instrucción 6 de Tarragona, y luego coordinada por Eurojust, tras descubrir los Mossos, no sólo la vinculación de los asesinatos con el crimen organizado de Marsella, sino que la acción se había preparado desde Francia. Así, a través de los oficiales de enlace en Cataluña compartieron información con sus 'colegas' galos, y se celebró la primera reunión operativa. A partir de ahí se creó un equipo conjunto que ha permitido asestar este golpe a la DZ Mafia, cuyos integrantes detenidos, tras numerosas vigilancias y controles, están acusados de asesinato, robo, receptación, violación de la legislación sobre armas, uso de matrículas falsas y asociación delictiva.