Backstreet Boys, la 'boy band' que quiso seguir creciendo
La banda estadounidense llenó el Palau Sant Jordi en su triunfal regreso a Barcelona
Barcelona
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónLos noventa, por lo menos un buen pellizco, fueron suyos. El blanco nuclear, las sonrisas como con dientes de más, todas esa carpetas colonizadas y convertidas en campo de batalla (o NSYNC o ellos), los estribillos en bucle y el bombardeo constante de la MTV… ... Historia (no tan antigua) del pop que los Backstreet Boys,fenómeno adolescente transmutado en fenómeno a secas, revivieron anoche en un Palau Sant Jordi lleno. Un claro ejemplo de que, contra todo pronóstico y pese a las constantes sacudidas estilísticas de las últimas dos décadas, quizá lo suyo no era una obsolescencia tan programada como cabría esperar.
Tampoco tenía futuro el punk y ahí sigue Iggy Pop, hecho un pincel y embadurnándose en la grasienta furia de los Stooges, así que nadie debería extrañarse, o por lo menos no demasiado, de que una 'boy band' filoquincuagenaria (51 años suma Kevin Richardson, el mayor de la troupe; cuarentaytantos el resto) siga abarrotando recintos y desatando un notable griterío a su paso. Puede que menos decibélico y punzante que en sus años mozos, cuando todo eran tímpanos perforados y corazones al trote, pero aún notable y a ratos ensordecedor.
Así que luces fuera, dentro palmas y aullidos y que empiece el espectáculo. En la pista, público familiar e intergeneracional. Madres e hijas con la misma camiseta, padres que , teléfono móvil en ristre, no pierden detalle de 'Get Down'. Brazos en alto, ahora para aquí, ahora para allá. Sobre el escenario, goteo de neones rojos y azules, negro riguroso en el vestuario y voces algo frías en el arranque. No ayuda el sonido del Sant Jordi, siempre tan apelmazado, pero nada de eso les impide despachar del tirón 'Everyone', 'I Wanna Be With You', 'The Call: y 'Don't Want You Back'. Sin músicos a la vista, el escenario es solo para ellos. Para bien y para mal. Para bien porque, bueno, ellos son el espectáculo. Y para mal porque sin nada más que mirar es imposible no fijarse en lo desangelado de algunas coreografías. Nada grave. No de momento.
'Show Me The Meaning Of Being Lonely' inaugura el tramo de las baladas. Hora de ponerse tiernos. AJ McLean exhibe poderío vocal en 'Undone' y Nick Carter reactiva la euforia cada vez que se dirige al público. «El año que viene celebramos nuestro 30 aniversario como grupo», anuncia, francamente sorprendido (o eso parece) de ver el recinto hasta la bandera.
Tirando una vez más del hilo de 'DNA', álbum de 2019 con el que se abrieron a sonidos más actuales y picotearon de la electrónica y el R&B, los estadounidenses parecer querer distanciarse de su imagen de 'poster-boys' para, nunca mejor dicho, seguir creciendo. Su historia, sin embargo, es la que es y el sismógrafo no falla: suenan 'Quit Playing Games (With My Heart)' y 'As Long As You Love Me' y ruge el Sant Jordi.
Ninguna canción más o menos reciente consigue algo parecido. Ya verán cuando caiga una 'Everybody (Backstreet's Back') saturada de bombo y también de nostalgia. Pues sí, han vuelto. Otra vez. Fiesta grande en el Sant Jordi, atracón de himnos coronado por 'We've Got It Goin' On' y desparrame final con 'I Want It That Way', la reciente 'Don't Go Breaking My Heart' y 'Larger Than Life'.
MÁS INFORMACIÓN
En el guion, pocos sobresaltos: cambios de vestuario para acabar de blanco nuclear, mucho parloteo (demasiado, quizá), una pizca de rayos láser y una plataforma elevadora que los acerca un poco al cielo mientras derriten unos cuantos corazones con 'I'll Never Break Your Heart'. Lo normal. En las pantallas, una secuencia de imágenes de hace un par de décadas confirma que, en realidad, lo de esta noche tampoco es tan diferente de lo de entonces. Ellos quieren crecer, sí, pero siguen siendo los mismos. Una foto fija en busca de un poco de movimiento.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete