Fue el pasado viernes cuando, tras declarar, la magistrada ordenó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del brasileño al considerar que existían indicios contundentes contra él, tras la denuncia de una joven de 23 años por una agresión sexual en la discoteca Sutton de Barcelona, la madrugada del 30 al 31 de diciembre, que avanzó este diario.
Ahora Martell, que lleva a la familia Pujol en la causa por corrupción pendiente de señalamiento de juicio en la Audiencia Nacional, y que también ha representado a Leo Messi en su litigio por fraude fiscal, se unirá a Puente para solicitar la puesta en libertad de Alves.
Riesgo de fuga
Puente ha detallado en comunicado que asesora al exlateral del F. C. Barcelona «en sus distintas empresas y actividades mercantiles». Fue la letrada que asistió a Alves tras su detención, tanto en la comisaría de la Policía catalana en Les Corts, como a su comparecencia en los juzgados.
El futbolista, recalca en el texto la abogada, se encontraba en el extranjero y, a través de ella, se ofreció a «prestar declaración y defender su inocencia». Pese a su colaboración, la juez ordenó su ingreso en prisión al entender que existía un elevado riesgo de fuga -Alves es brasileño, y con dicho país no existe tratado de extradición- y también que las pruebas contra él eran «contundentes».
Ahora su defensa presentará un recurso para pedir al juzgado su puesta en libertad.
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