Tudanca se aparta del carril sanchista y llama «a una reflexión» en el PSOE

Alguno más se atrevió a mentar la palabra «reflexión», pero no lo hizo así el partido como tal en palabras de su flamante portavoz, Esther Peña, paisana de Tudanca y encargada en esta ocasión de evitar la autocrítica que sí se pudo entresacar de las palabras de su compañero.

La 'puyita', que posiblemente quede solo en eso, llega en un momento algo complicado para el ya tres veces candidato sin éxito a presidir la Junta -cuatro si se cuenta la fracasada moción de censura impulsada desde Ferraz-. ¿El motivo? Quedarse al margen de la decisión de una serie de nombramientos, entre ellos el relevo de la delegada del Gobierno y de la subdelegada en Valladolid -Virginia Barcones y Alicia Villar, respectivamente- en sustitución de personas -Nicanor Sen y Jacinto Canales- vinculadas al diputado y secretario provincial de los socialistas en León, Javier Alfonso Cendón, y al nuevo ministro de Transportes, el vallisoletano Óscar Puente, cuyas propuestas sí fueron escuchadas desde la dirección socialista.

Tras el desaire, Tudanca y su núcleo duro anunciaron que habría cambios tanto en la Ejecutiva como en el Grupo Parlamentario. Los primeros se produjeron sin la relevancia esperada y los segundos aún están pendientes de conocerse con la incógnita de si podrá hacer finalmente o no lo que tenía en mente. Una llamada a la «reflexión» lanzada por Tudanca a la que se agarró el secretario general del PP de Castilla y y León, Francisco Vázquez, para animar a los socialistas a que precisamente hagan eso: recapaciten.

Ante «una de las pocas veces» en las que reconoció «estar de acuerdo» con el dirigente socialista, el número dos de los populares sí marcó por dónde deberían dirigirse ahora los pasos: «Tiene que servir para separarse de las políticas sanchistas». «Si hay algo de valiente en los socialistas de Castilla y León, les pido que rompan con el partido sanchista», llamó Vázquez. Eso sí, justo antes de reconocer que «no» alberga «muchas esperanzas» en que su petición se haga realidad, por más que, consideró, «el sanchismo castiga» a las comunidades «leales» como Castilla y León y «premia a los que más privilegios están teniendo». «Que reflexionen, que rompan con él, que lo que hace es perjudicar a Castilla y León», incidió el número dos de los populares, quien en ningún momento se refirió al PSOE, sino al «partido sanchista», ya que se trata de una formación «caudillista» en la que «sólo manda una persona» y el que se posiciona en contra «ya sabe lo que tiene que hacer: irse».

Frente a esta formación que salió «despeñada» de las urnas en Galicia, que dijeron «un no rotundo al partido de Sánchez, a los pactos con los separatistas y a quienes propugnan la amnistía», Vázquez subrayó la «buena noticia» para los gallegos y los españoles, tras haber «votado masivamente» al PP, a Alfonso Rueda «y por si cabía alguna duda, a las políticas de Alberto Núñez Feijóo».

También el presidente del PP de Valladolid, Conrado Íscar, puso «de relieve» la figura de Feijóo, por lo que dio la «enhorabuena» en «un día de felicitación» para el reelegido presidente de la Xunta con una victoria que «demuestra» lo «que quieren los españoles».No sólo a la «reflexión» en el seno socialista llamó el presidente del PP de Soria, Benito Serrano. Fue más allá en su análisis, y aseguró que tras esta legislatura el PSOE quedará como un partido «residual». Serrano apuntó, en declaraciones recogidas por Ical, que la democracia en España necesita una formación de izquierdas socialista « fuerte» que se alterne en el gobierno con el PP, pero ahora Sánchez «se está cargando el PSOE».

Asimismo, el secretario general de UGT en Castilla y León, Faustino Temprano, apuntó que tanto el PSOE en Galicia como en España «se lo tienen que hacer mirar» tras ser el «gran derrotado» este 18F.