Sonorama regresa al futuro con Celtas Cortos, Jeanette y Coque Malla
Algo más de 20.000 personas se congregan en la primera jornada de la 25 edición del Sonorama Ribera, que espera recibir a 30.000 diarias en las jornadas venideras
Sonorama: guía para no perderse en su 25 aniversario
ARANDA DE DUERO
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónLa plaza del Trigo ha vuelto a rugir. Tras dos años de tenso silencio, el centro abigarrado de Aranda de Duero (Burgos) recibe de nuevo a miles de personas que, armadas con el habitual uniforme compuesto por pistolas de agua y camisas hawaianas, corean las ... canciones de quienes pueden llegar a ser las nuevas voces del pop nacional. Este jueves ha sido el primer día del Sonorama Ribera 2022, que pretende desplegar las alas y reunir en su 25 cumpleaños a una gama ecléctica de artistas nacionales y extranjeros, con alguna que otra sorpresa de por medio. Lejos queda ya la versión reducida que montaron el año pasado para enfrentarse a una pandemia que se resistía a abandonar la vida cotidiana.
El primer día siempre es el de arranque, el de calentar motores, el de bajar radicalmente la media de edad de una población de poco más de 32.000 habitantes y subir a la pila bautismal del Indie, bajo el sol del mediodía, a posibles grupos revelación. Este jueves fue la oportunidad de Jack Bisonte, a quien resarcieron desde la organización por el poco tiempo del que el dúo dispuso en la edición de 2021 debido a las restricciones horarias. Les acompañaron Kora o Sienna, que dieron paso a la primera sorpresa de la edición: Nena Daconte.
Por la tarde, aguantando los 35 grados de un verano que ha convertido la meseta en una olla de cocción lenta, los más valientes se acercaron al recinto del festival -ubicado en el polígono industrial arandino- para disfrutar rock celta de los vallisoletanos Celtas Cortos o atreverse con un pogo bajo el guitarreo furioso de Triángulo de Amor Bizarro.
Future Islands fue la gran sorpresa de la noche, dejando muy alto el listón para grupos con mejor acogida, puesto que se trata de un festival que prima la música en español. Con un líder carismático, que hacía gala de una actitud de 'Show Man' a la altura de los meneos de cadera más famosos de la industria musical, la banda de synth pop estadounidense se ganó una ovación y los vítores del público. El que mejor se lo pasó, sin duda, fue el cantante.
Jeanette, por su parte, decidió montarse un karaoke de lujo y, tras despachar en los primeros minuto sus grandes éxitos, llenó el escenario de amigos como Chloé Bird, Gabriel de la Rosa (Shinova) o Coque Malle -con quien hizo una colaboración para su disco de duetos 'Mujeres' (2018)- con los que se dedicó a versionar grandes éxitos internacionales como 'These Boots Are Made for Wakin', de Nancy Sinatra o el 'Look What They've Done To my Song' de Melanie. También dejó entrever que -además de la música- el diseño gráfico es su pasión, con unos fondos de pantalla atrevidos que sólo ella se puede permitir.
Rozalén, verbenera y divertida como siempre, aprovechó para reivindicar desde el escenario la importancia de la salud mental y la visibilización de las altas tasas de suicidio entre la gente joven. También aprovechó para secuestrar brevemente una bandera del público. La de Jóvenes Castilla y León, concretamente, que no se cansan de pedir que se frene la despoblación en la Comunidad. Ella estuvo de acuerdo y exhibió el pendón ante un público intergeneracional. La estrella de su actuación, como viene a ser habitual, fue su intérprete en lengua de signos. La cantautora albaceteña sigue siendo una de las pocas artistas que hace posible que su música pueda ser disfrutada por gente sorda.
Tras ella, Coque Malla se reconcilió con Los Ronaldos a quienes, casi, dedicó todo el concierto. También lo hizo con una canción que todo el mundo sabe que odia -aunque él nunca lo haya dicho en voz alta- y Sonorama le dijo que sí, que no puede vivir sin él. No hay manera.
La noche se deshizo, poco a poco, con el sonido guitarrero de Rulo y la Contrabanda y, después, la electricidad de Belako, mientras un goteo de personas iban abandonando, poco a poco, el recinto, guardando algo de fuerza. Todavía queda mucho festival por delante. Espero que nos acompañéis en este viaje.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete