Baja el nivel de alerta de los fuegos de Montes de Valdueza (León) y Vegalatrave (Zamora)

En concreto, el incendio de Montes de Valdueza ha bajado este lunes a nivel 1 tras una semana en nivel 2, al que fue elevado el pasado 2 de julio, informa Ical.

En cuanto al de Vegalatrave, que se inició este domingo en zonas próximas a las afectadas por los recientes incendios de la Sierra de la Culebra y Losacio -que suman cerca de 55.000 hectáreas- y ya ha calcinado 2.000 nuevas hectáreas de terreno, ha bajado este lunes de nivel 2, en el que se encontraba desde ayer por posible afección a zonas pobladas, a nivel 1.

El Centro de Coordinación Operativa Integrado ha autorizado el realojo de las seis localidades de la Tierra de Alba que fueron evacuadas anoche por este incendio de Vegalatrave, según confirmaron fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Zamora. Parte de las personas evacuadas fueron acogidas en el recinto ferial de Ifeza, en la capital zamorana. De esta forma, ya pueden volver a sus casas los habitantes de Losacio, Olmillos de Castro y sus anejos Marquiz de Alba y Navianos de Alba, y Losilla y San Pedro de las Cuevas, del municipio de Santa Eufemia del Barco. Asimismo, queda anulado el preaviso de desalojo para Santa Eufemia del Barco, Perilla de Castro y la urbanización de La Encomienda.

Por el momento, no hay confirmación oficial de que se haya reanudado el tráfico ferroviario en la zona ni en las carreteras ZA-902 y ZA-V-2419, en el cruce de Olmillos de Castro, además del camino asfaltado entre Muga de Alba y Losacio, aunque es previsible que se restablezca enseguida.

Por otro lado, en el incendio de Quintanilla del Coco (Burgos), que continúa activo y en nivel 2, se espera que próximamente puedan volver a sus casas los vecinos evacuados de Hacinas, Carazo y Villanueva de Carazo, mientras que los de Santibáñez del Val y Santo Domingo de Silos -donde las llamas han arrasado varias edificaciones- continuarán desalojados.

Las labores de extinción se han centrado durante la noche en los incendios de Ávila y Burgos, donde bomberos y brigadistas han contado con el apoyo de numerosos voluntarios de la comarca.

«La situación es escalofriante, hay casas hundidas y gran parte del pueblo destrozado», ha explicado un vecino de Covarrubias desplazado hasta Santibáñez para ayudar en las labores de extinción.

La rapidez con la que avanzaban las llamas obligó a desalojar a cerca de medio millar de personas de cinco localidades, entre ellos la comunidad benedictina del monasterio de Santo Domingo de Silos.

En esta localidad, al menos, el fuego ha calcinado ocho edificios y varias naves, si bien el trabajo de profesionales y vecinos evitó que se adentrase en el casco urbano y afectase al resto del término municipal y al emblemático monasterio.

La comarca a la que afecta el incendio, declarado por la Junta de Castilla y León de nivel 2, es una de las más turísticas de la provincia de Burgos y atesora el parque natural Sabinares de Arlanza y numerosos monumentos, como el propio monasterio salense o los que posee la villa rachela de Covarrubias.

En la zona también se encuentran los yacimientos de dinosaurios de Salas de los Infantes y el emplazamiento donde se rodó parte de la película 'El bueno, el feo y el malo', puesto en valor por la Asociación Sad Hill.

El incendio continúa activo y las personas desalojadas permanecen en Salas de los Infantes, donde se les ha habilitado el polideportivo para pasar la noche.

Por lo que respecta al de Vegalatrave (Zamora), las llamas afectaron en mayor o menor medida, a una decena de casas en la localidad de Losacio. «Unas tocadas y otras, quemadas enteras, además de un par de naves. Eran casas medio abandonadas pero alguna, de gente que se ha ido a Zamora y no han podido y les ha afectado bastante. Incluso a mí, una que estaba a las afueras se ha quemado toda. Peor no puede estar la cosa. Todo lo que se diga es muy poco», ha denunciado, en declaraciones a la agencia Ical, el alcalde de Losacio, Santiago Campo.

«Los bomberos se marcharon pasadas las tres de la madrugada, se revivieron los fuegos y tuve que llamar otra vez. No entiendo que no quedase un retén. Estoy muy cabreado porque llevamos una semana terrible y, a la hora de la verdad, ves que nadie aparece. Estamos con unos nervios terribles. Ahora las cosas están más tranquilas, pero nosotros no. Se ven los fuegos que se reavivan. No podemos estar tranquilos», ha añadido.

Santiago Campo ha recalcado que «hay gente del pueblo que se ha jugado la vida y que ha salvado casas» y que «si no es por los del pueblo, se queman muchas más».

Por su parte, el alcalde de Santa Eufemia del Barco, José Antonio Calvo, ha apuntado a Ical que «la noche ha sido tranquila» y que el fuego no llegó al casco urbano del anejo de Marquiz de Alba. «Simplemente, hemos estado en guardia toda la noche, vigilando que no llegara. Hubo preaviso de desalojo y, de hecho, se evacuó a las personas mayores y a los niños pero nada más. Todo está controlado ahora y hay tranquilidad total», aseguró.