Okupan más de 40 viviendas en una comunidad de Valladolid y hacen frente a las acusaciones de los vecinos: «Tengo más educación»
Los vecinos aseguran que la convivencia en el edificio es insostenible
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Los vecinos de un inmueble en Arroyo de la Encomienda (Valladolid) enfrentan una situación crítica con más de 40 viviendas okupadas ilegalmente en su comunidad. Ante la falta de soluciones, esta semana han decidido salir a las calles en protesta. Denuncian que llevan dos ... años reportando el problema, pero no ha habido cambios ni respuestas efectivas por parte de las autoridades.
El pasado lunes 9 de septiembre, los propietarios convocaron una concentración en la plaza de España bajo el lema «Arroyo, territorio okupa». Su objetivo es denunciar la inacción de la Sociedad de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), propietaria de muchas de las viviendas afectadas.
Los vecinos denuncian que la convivencia es imposible
Los vecinos aseguran que la convivencia en el edificio es insostenible. Las zonas comunes están gravemente deterioradas, las inmediaciones están llenas de basura y se enfrentan a elevados gastos de mantenimiento y seguridad. Denuncian, además, que algunos okupas se conectan ilegalmente a los servicios de luz y gas, lo que agrava el deterioro de la comunidad.
También critican la gestión de Sareb respecto a los alquileres sociales, señalando que en algunos casos no se cumple su función social. Los residentes se sienten abandonados por las instituciones y creen que las autoridades han permitido que la situación continúe sin control.
Uno de los vecinos afectados, Alberto, aseguró ante las cámaras de 'Vamos a ver' (Telecinco) que la situación se ha alargado demasiado y que ya no pueden más. «Cuando hay una okupación masiva como pasa aquí, al final ese okupa no cuida el inmueble. Nos encontramos basura, plagas de insectos, puertas forzadas... y la comunidad, a parte del daño moral, tiene que hacer un desembolso económico para mantener las cosas«, lamentó el vecino.
Los okupas se defienden: «Aquí se vive muy bien»
Por otro lado, 'Vamos a Ver' tuvo la oportunidad de entrevistar a uno de los okupas del inmueble, que aseguró que su situación era distinta a la que se denunciaba. «Yo no soy okupa, fui engañado y he ganado el juicio. Yo pago el agua, la luz... y la comunidad no la pago porque me lo han negado», afirmó.
Este mismo okupa negó las supuestas amenazas que, según los vecinos, les han hecho. «Aquí se vive muy bien, no se matan animales y no hay amenazas. Somos gente civilizada, no salvajes y os invito a dormir a mi casa cuando queráis», aseguró. «Han llegado a decir que vendíamos droga. La Guardia Civil vino y se quedaron asustados al ver la verdad. En mi portal no pasa nada de eso que denuncian los vecinos y yo tengo más educación que mucha gente que no dicen ni buenos días«, añadió.
Otra de las personas que ocupa una de las viviendas explicó a 'Vamos a Ver' que su grupo también busca una solución legal y estable para la situación. «Los más interesados en regular esta situación somos nosotros, que somos gente normal que estamos trabajando y nuestros hijos estudiando«, dijo. También señaló que, aunque intentan ayudar a los vecinos, no reciben ningún tipo de apoyo por parte de ellos. »Formaremos nosotros también nuestra plataforma porque somos víctimas y hemos sido estafados«, concluyó.
La Sareb defiende que lleva más de un año trabajando
La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) asegura que lleva más de un año trabajando para resolver la situación de las viviendas del bloque. Tal y como ha señalado el organismo a 'Europa Press', hay 44 denuncias pendientes de señalamiento judicial en relación a estos casos, lo que impide avances inmediatos en la resolución del conflicto.
La Sareb explica que están abordando la situación mediante distintas estrategias, según el tipo de ocupación en cada vivienda. En algunos casos, han identificado okupaciones conflictivas por parte de personas que se niegan a colaborar, lo que agrava los problemas de convivencia en el bloque.
Una vez que los juzgados fijen los señalamientos y se logre desalojar los más de 40 pisos ocupados, la Sareb asegura que tomará medidas de seguridad para cerrar las viviendas. Posteriormente, tienen previsto poner esos inmuebles a la venta. Mientras tanto, han detectado que 15 de los pisos están ocupados por familias vulnerables, a las cuales se les ha ofrecido un alquiler social con condiciones específicas, como el seguimiento de un mediador social.
Por otro lado, la sociedad está colaborando con el Ayuntamiento de Arroyo de la Encomienda y las fuerzas de seguridad para verificar si las otras 14 viviendas están ocupadas por familias conflictivas. Además, informan que en el bloque hay doce pisos ocupados legalmente por inquilinos que firmaron un contrato de alquiler con la anterior propiedad del edificio.
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