Juegos de la convivencia, la amistad y los valores

Todos coincidieron en que eran «los juegos de la convivencia y los valores».Los participantes, estudiantes de once colegios maristas, compitieron en siete deportes: fútbol sala, baloncesto, voleibol, atletismo, bádminton, tenis de mesa y natación, y además, se entregaba un premio al 'fair play marista' al colegio que presentara una mejor conducta deportiva a lo largo de todo el evento. Según afirman desde la Provincia Compostela, las Olimpiadas Maristas «pretenden promover los valores educativos del deporte, el trabajo en equipo y el juego limpio».

Los colegios de Valladolid La Inmaculada y Centro Cultural Vallisoletano fueron los anfitriones. Cada colegio participante estaba representado por equipos formados por alumnado de 4º de la ESO, 1º y 2º de Bachillerato y 1º y 2º de FP. Además de la competición deportiva, el programa se completaba con distintas actividades de convivencia, turismo y cultura.

El juego limpio estuvo muy presente en todo el evento porque se reconocieron con una 'tarjeta blanca' las actuaciones de aquellos jugadores o equipos que destacaron por su compañerismo y su buen hacer en las canchas deportivas y, en la clausura, se entregó el Premio Fair Play Marista, que obtuvo el Colegio maristas Santa María de Orense.

Una tarjeta blanca que ganaron todos los voluntarios de La Inmaculada y el Centro Cultural Vallisoletano, los cuales dedicaron meses de trabajo en las Olimpiadas y todos los profesores y alumnado que desarrollaron proyectos educativos en las distintas etapas. Alumnos de últimos cursos, familias y profesores se volcaron en la organización de este evento y de la acogida al alumnado participante.

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, el presidente de la Real Federación Española de Voleibol, Agustín Martín, y el viceprovincial marista, el hermano Salvador Hidalgo, inauguraron la competición. Carnero animó a los asistentes a disfrutar de la «competición, la ciudad y la convivencia». Para Agustín Martín, exvicepresidente del COE, este evento muestra el «deporte en estado puro» y los valores olímpicos que, como indicó Salvador Hidalgo, se suman a los valores maristas de «sencillez, modestia y humildad».

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Los directores de los dos colegios maristas de Valladolid organizadores de las Olimpiadas, Roberto González, del Centro Cultural Vallisoletano, y Beatriz García, de La Inmaculada, fueron los anfitriones de este encuentro, al que también bautizaron como las «olimpiadas de la convivencia y la amistad».

La inauguración contó también con la presencia de Mayte Martínez, concejala de Deportes de Valladolid y exatleta olímpica en diferentes olimpiadas.Además de la competición deportiva, el programa de esta competición deportiva escolar se completó con distintas actividades de convivencia, turismo y cultura. Todo ello gracias al trabajo de los voluntarios y la colaboración del Ayuntamiento de Valladolid, de la editorial Edelvives, de Sanitio Formación (perteneciente al grupo Recoletas), de la UIE: Universidad Intercontinental de la Empresa, y de Serunión alimentación.

En la clausura, el Hermano Máximo Blanco, provincial de la Provincia marista Compostela, destacó como objetivo de estos encuentros fomentar los valores deportivos, la convivencia y que «cada deportista se lleve nuevos amigos» de unos juegos que ya cuentan con una larga tradición en la comunidad marista, que ya prepara los siguientes, en 2025, y que se celebrarán en el Colegio Marista de Carcavelos (Portugal).