Así lo ha comunicado este viernes la Subdelegación del Gobierno en la provincia segoviana, que ha detallado que componentes del UPRONA (Unidad de Protección de la Naturaleza) han solicitado a su propietario la documentación acreditativa de su tenencia legal, pero no ha aportado ningún documento.
Por ello, se ha procedido a la intervención cautelar de los dos caparazones, que quedaron bajo depósito de su dueño a disposición de las autoridades competentes y se ha formulado denuncia por supuesta infracción administrativa de contrabando por la tenencia de partes o derivados de especies CITES (Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres) sin cumplir con los requisitos legalmente establecidos.
Las tortugas marinas, entre la que se encuentra la familia a la que pertenece este ejemplar, están incluidas en el Apéndice I del CITES, que prohíbe el comercio internacional de esas especies, así como de sus partes o derivados, salvo cuando la importación se realiza con fines no comerciales, por ejemplo, para la investigación científica.
En estos casos excepcionales, puede realizarse la transacción comercial siempre y cuando se autorice mediante la concesión del correspondiente permiso.
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