Los hechos sucedieron durante la madrugada del 28 de agosto, cuando en un establecimiento de ocio nocturno ubicado en el centro de Valladolid. En él dos chicos fueron agredidos, sin mediar palabra, y únicamente por el hecho de portar una camiseta con la inscripción 'siempre antifa, Valladolid', informa en un comunicado la Policía.
Desde el primer momento, los investigadores sopesaron la posibilidad de que se tratase de una agresión con motivación ideológica, lo que hizo que se tratara como un delito de odio. Una línea de investigación que se confirmó posteriormente y que derivó en la detención de cinco varones, todos ellos afines a grupos ultras del fútbol, incluso alguno con incidentes relacionados con la violencia en el deporte.
A los cinco detenidos se les imputa un delito relativo al ejercicio de los derechos fundamentales y las libertades públicas, comúnmente conocido como delito de odio, y tras ser puestos en libertad, se remitió el correspondiente atestado a la autoridad judicial competente por unos hechos que pueden ser castigados con hasta dos años de prisión.
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