Castilla y León elimina la obligatoriedad de las mascarillas en los centros sanitarios

La orden del Ministerio de Sanidad recogía expresamente que las comunidades pueden eliminar la imposición de las mascarillas si durante dos semanas se produce un descenso en la tasa de incidencia de los virus respiratorios agudos, lo que se producía el pasado martes en Castilla y León.

La Comunidad registraba en la semana del 8 al 14 de enero el segundo descenso consecutivo de la tasa de infecciones respiratorias aguas, con 1.389 casos por cada 100.000 habitantes frente a los 1.477 de la anterior y los 1.508 de la última de diciembre del pasado año, cuando se alcanzó el pico máximo.

No obstante, y pese a la supresión de la obligatoriedad de la mascarilla, el portavoz del Gobierno regional ha insistido en la recomendación de su uso «no sólo en los centros sanitarios sino también en los dedicados a los servicios sociales y residencias» y también para las personas que presenten síntomas de infecciones respiratorias o que sean «especialmente vulnerables». Asimismo, «en cualquier ámbito donde la acumulación de personas sea muy notable» o convivan personas de «especial vulnerabilidad».

Ha subrayado, además, la conveniencia de su uso en los espacios compartidos de los centros sanitarios en los que los responsables de Medicina Preventiva o Salud Pública consideren especialmente importante tomar medidas de precaución, tales como salas de espera, área de consultas, Unidades de Cuidados Intensivos, área de urgencias, etc.

El consejero señaló también que la medida entra en vigor ya y el uso de 'tapabocas' se ciñe a la recomendación, también por prescripción facultativa si los médicos consideraran necesario su uso por pacientes puntuales.