El Ayuntamiento de Ávila declara el estado de emergencia ante las inundaciones «de gran magnitud» que registra la ciudad

El decreto de la Alcaldía, al que ha tenido acceso Ical, argumenta que el estado de los ríos y zonas afectadas requiere «resoluciones inmediatas» en lo que supone una crisis de «gran magnitud». Además, indica que los datos pluviométricos e hidrológicos y las predicciones meteorológicas prevén una «extensión o agravación» de unos acontecimientos «catastróficos».

La declaración del estado de emergencia permite al Ayuntamiento de Ávila «contratar libremente» las actuaciones que considere necesarias «sin sujetarse a los requisitos formales establecidos en la Ley de Contratos del Sector Público». No obstante, requiere de su «debida motivación, justificación del coste y aprobación singular». En caso de que no exista crédito «suficiente», podrá habilitarlo de acuerdo a la normativa presupuestaria.

Y es que las intensas lluvias caídas en la tarde-noche del jueves y la madrugada de este viernes han provocado el desbordamiento de los ríos Adaja y Chico, que han convertido la zona sur de la capital en el entorno de la plaza de toros en un enorme lago que corta calles, inunda zonas bajas (garajes, bajos y algunos negocios) y obliga a intervenir a varias intervenciones de Policía Local, Bomberos y Protección Civil.

La subida del nivel del río Adaja a su paso por la ciudad ha llevado a la Confederación Hidrográfica del Duero a establecer el aviso rojo, y a las cuatro de la mañana quedaba cortada la carretera AV900, entre las glorietas de la plaza de toros y de Derechos Humanos; una hora después, con la situación sin remitir, la Subdelegación del Gobierno cortaba al tráfico el tramo urbano de la carretera N403 (puente del Papa), y media hora más tarde se hacía lo propio con la pasarela peatonal sobre el río Chico entre las calles Santo Tomás y Radio Nacional de España. La pasarela que sobre ese mismo río lleva desde la Avenida Juan Pablo II hasta la plaza de toros estaba a esa hora completamente tapada por el agua.

El alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, ha informado de que de madrugada fueron alertados todos los vecinos de las zonas inundables del entorno de la plaza de toros para que pudieran evacuar los vehículos de los garajes y zonas bajas, y «también para que estuviesen en preaviso por si fuera necesario evacuar la zona», al tiempo que confirmaba que había habido que atender a personas con movilidad reducida.

También un grupo de niños de un centro de educación teresiano de la ciudad de Sevilla que se alojaba en la residencia de monjas situada frente al Soto y ha tenido que recibir ayuda de la Policía Local y Protección Civil para salir de donde estaba alojado, ya que todo el recinto estaba inundado.

También han sido cortadas al tráfico diversas calles de la ciudad y los accesos a otros puntos de la provincia. De hecho, las inundaciones también se han dejado notar en pueblos como El Maello y Naveluenga, donde los ríos Voltoya y Alberche también se han salido de su cauce aumentando su caudal habitual considerablemente.

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En el caso de El Maello , el desbordamiento se ha producido a su paso por la urbanización del Coto de Puente Viejo, en el término municipal abulense de Maello y ha provocado graves daños en una cincuentena de viviendas de la localidad, tal y como ha confirmado a Diario de Ávila el alcalde del municipio, Javier García, que ha explicado que, desde este jueves por la noche, tanto el Consistorio como los vecinos ya estaban prevenidos de que algo así podía ocurrir.

García ha apuntado que hay «daños materiales muy importantes» al existir «casas totalmente inundadas», y ha reseñado que se puso en contacto con el presidente de la urbanización para avisar a todos los propietarios de viviendas en la misma, dado que buena parte de las en torno a 400 viviendas con las que cuenta el Coto de Puente Viejo son segundas residencias que se utilizan, principalmente, en época estival.

Por ello, «no hay vidas en peligro», ha subrayado el alcalde de Maello, que ha señalado que en los 50 años que lleva en el pueblo jamás vio algo así. «Y lo mismo me dicen los que llevan más tiempo aún».