Argüello espera que su nuevo cargo «repercuta en el bien de la Diócesis de Valladolid»

A través del perfil de la diócesis en la red social X, Argüello agradece «los buenos deseos» que le han trasmitido los fieles y el clero vallisoletanos, al tiempo que pide «perdón por las molestias que esta nueva responsabilidad pueda provocar»

«Espero que este nuevo servicio a la Iglesia sea algo que repercuta en el bien de la comunión y la misión vivida en la diócesis«, señala el prelado. «Pido para mi y para todos que el Espíritu Santo, luz de los corazones, nos impulse a anunciar el Evangelio y que ofrezcamos el amor que brota del corazón de cristo a todos aquellos que se acerquen a nuestra vida», concluye.

El nombramiento este martes de Luis Argüello como presidente de los obispos españoles era algo esperado en Valladolid de ahí que no haya sido precisamente una sorpresa. El vicario general, Jesús Fernández Lubiano, ha transmitido «la alegría de la diócesis porque significa que tenemos un obispo valorado que puede hacer una gran labor en la Iglesia». «Igual que aquí ha hecho una buena labor como sacerdote y como obispo, lo hará en la Conferencia Episcopal Española, en la que sabrá gestar la comunión entre los obispos y ser el rostro de la Iglesia ante la sociedad española»

Fernández Lubiano ha reconocido que «tendremos que compartir un poco de su tiempo, su trabajo y su persona y estará un poco más ausente pero tendremos la frescura de conocer lo que sucede en la iglesia española». «Tiene mucho carrete, mucha capacidad de trabajo», ha añadido el número dos de la diócesis.

Ante la posibilidad de que se nombre un obispo auxiliar en Valladolid, igual que lo fue Argüello cuando su antecesor como arzobispo Ricardo Blázquez fue nombrado cardenal, ha matizado que «la historia no es necesario que se repita» aunque, en todo caso, «es una decisión de Luis Argüello solicitarlo y del Papa concederlo».