Antonio Piedra, Premio Castilla y León de Humanidades: «Un archivo es memoria viva de alguien»

En este último papel, subrayó el jurado, el salmantino, «cronista único» de la historia reciente, «ha realizado un intenso trabajo de estudio, divulgación y preservación del patrimonio escrito de algunos de los más importantes personajes de la literatura y la cultura hispánica». Además, la resolución también destacó «su labor en la salvaguarda de archivos literarios e históricos».

La noticia fue para el premiado «una gran alegría», que recibió «muy satisfecho y compensado» y como «un acicate para seguir trabajando», indicó ayer a ABC. Ahora mismo, se afanan entre los volúmenes y archivos de José Jiménez Lozano, y toda su «sabiduría», ejemplifica.

«Un archivo es memoria viva de alguien que ha vivido de forma distinta las cosas», recordó Piedra, que se mostró «encantado» con un reconocimiento que, está convencido, «premia una labor conjunta» en la institución que dirige. «Las fundaciones cuidan el recuerdo. Para eso estamos, para preservar lo escrito, la literatura, que va más allá de sí misma, porque es también pensamiento o vanguardia. Es todos esos aspectos que inciden en el ser, en el corazón, en la libertad, en lo que es una nación», describió.

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Nacido en El Soto, una pequeña alquería ya extinta en el límite entre las provincias de Salamanca y Ávila, Antonio Piedra también reafirmó su orgullo por recibir el premio en su tierra. «Yo soy fiel a mis orígenes», afirmó, para recuperar unos versos en los que, precisamente, Jorge Guillén cantaba a 'su' Valladolid. «Pienso que esa diminuta alquería que ya no existe, el ser de allí, le hace a uno mucho más universal», añadió. «Siempre Castilla y León, ese es mi ámbito».

El Premio de las Ciencias Sociales y Humanidades, que se inauguró en 1984 con Antonio Tovar, ha reconocido desde entonces a personas y entidades cuyo trabajo promueve avances decisivos en geografía, historia, antropología, ciencias jurídicas, sociología o economía. Entre otros, el equipo investigador de Atapuerca, en 1997; el filólogo Víctor García de la Concha (2002) o, más recientemente, Araceli Mangas Martín, en 2017; Alex Grijelmo (2018); Teófanes Egido, en 2020 y Miguel Ángel Verdugo Alonso, en 2021.

Cada año, los Premios Castilla y León conceden también una distinción en las categorías de Investigación Científica y Técnica e Innovación, Letras, Artes, Valores Humanos y Sociales, Deporte, y Tauromaquia. Esta última modalidad se estrenará este año.