‘Salus’, salud y salvación para La Raya

La muestra, que se puede visitar hasta octubre en el santuario mariano diocesano de la Virgen de la Salud, en Alcañices (Zamora), incluye 172 obras de entre los siglos III y XXI procedentes principalmente de las 84 parroquias de esas comarcas del oeste zamorano, aunque también hay aportaciones de la Diócesis portuguesa vecina de Braganza-Miranda.

Entre las obras expuestas figuran desde piezas de orfebrería firmadas por el platero Antonio Rodríguez, hasta esculturas renacentistas de Juan de Montejo, el Cristo articulado del siglo XIX que protagoniza la procesión del Santo Entierro de Bercianos de Aliste o pinturas del siglo XX de Ricardo Segundo, sin dejar de lado otras firmas artísticas como las del imaginero zamorano Ramón Álvarez o el escultor contemporáneo Ricardo Flecha. No faltan tampoco documentos archivísticos, ejemplares bibliográficos, fotos e imágenes cinematográficas de interés histórico y turístico, estelas hispanorromanas, piezas de metalistería, adornos personales, mobiliario, ornamentos y textiles.

Todas estas obras conforman una prolija representación del arte sacro de un territorio de La Raya fronteriza que con esta exposición pretende contar con «un revulsivo para una zona tan deprimida desde la perspectiva socioeconómica en el pasado y tan lastrada por la despoblación en el presente», según apunta el comisario y experto en arte sacro José Ángel Rivera.

La muestra utiliza como título la palabra latina que significa salud y salvación para conmemorar, con dos años de retraso a causa de la pandemia, el centenario de la talla mariana patrona de Aliste que da nombre al santuario en el que se celebra. La Virgen de la Salud se ha utilizado como pretexto para confeccionar una exposición que muestre la historia, el arte y las tradiciones de la Iglesia en Alba y Aliste.

El arcipreste Fernando Lorenzo subraya el carácter pionero de una exposición de gran envergadura organizada en una zona del medio rural que es «el epicentro de la llamada España vacía o vaciada de Zamora». También a la condición de zona despoblada revitalizada con esta muestra alude el obispo de Zamora, Fernando Valera, que indica que los arciprestazgos de Alba y Aliste «se ponen de pie y levantan la cabeza» con una exposición como Salus que muestra «la belleza de sus raíces con historia».

El montaje se estructura en seis capítulos , el primero de los cuales descubre el territorio y las iglesias de la zona a través de mapas históricos, documentos archivísticos o planimetrías de los siglos XVIII y XIX. Bajo el título de «signados y guiados por la cruz», el segundo apartado expositivo recopila libros sacramentales y de cuentas, conchas bautismales o cruces parroquiales, las más antiguas del siglo XIV.

En una tercera zona expositiva se pueden ver sagrarios, patenas y cálices, custodias, incensarios, moldes para fabricar hostias sagradas, atriles o paños de ofrendas de los últimos quinientos años mientras que en la cuarta área de Salus se exponen esculturas y pinturas de Cristo, la Virgen y los santos de entre los siglos XIII y XIX.

La quinta parte de la exposición está dedicada a las asociaciones de fieles, las devociones y las tradiciones y muestra libros de cofradías, varas de mayordomos, objetos piadosos o vestimentas, además de fotos y proyecciones antiguas sobre ritos tradicionales.

La muestra concluye con «el descanso eterno», un apartado para observar crucificados articulados, relieves de ánimas, esquilas de viático y diversas tablas y ornamentos.