Polígonos: Villadangos continúa al alza

Además, ha activado 12,5 millones procedentes de instrumentos financieros, mientras que dos millones más servirán para financiar inversiones que fortalezcan las infraestructuras de suministro de gas y de electricidad en el polígono. Con todo ello, según el comunicado remitido a los medios, la Administración autonómica confía en que se posibilite «la instalación de nuevas empresas» y que las ya existentes se beneficien de una «mejora de las condiciones». No obstante, para que lo primero -esa llegada de más empresas- sea posible, se necesita dar un paso más y ampliar el espacio que actualmente ocupa el polígono, en lo que ya se está trabajando. Hace apenas unos días que el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones aseguraba que se pretende alcanzar una ampliación de cerca de 200 hectáreas porque «prácticamente todas las parcelas están comprometidas y ocupadas».

El alcalde, Alejandro Barrera, confirma este extremo. «El suelo industrial está ocupado en más de un 90 por ciento y del resto hay parte solicitado y algunas parcelas bloqueadas por el trazado del nuevo ramal ferroviario. De hecho, hay varios proyectos que están interesados y que en el polígono actual no tienen cabida por falta de espacio y creo que en ninguna parte, y más en las circunstancias en las que estamos, se debe perder ningún proyecto por un problema de suelo». Para Barrera que esta ampliación se pueda llevar a cabo obedecerá en gran medida a que la Junta de Castilla y León «ofrezca a la Junta Vecinal, que es la propietaria del terreno, las mejores condiciones. Si se amplía o no dependerá de los vecinos, que deben votar en concejos», destacó, y para que el resultado sea positivo hay que tener en cuenta que en Villadangos sienten por este territorio «un arraigo muy especial porque fue adquirido en una época en la que había mucha pobreza en esa zona».

Actualmente, según los datos de la Junta, el polígono cuenta con una superficie neta de 1.226.386 metros cuadrados repartida en 260 parcelas dotadas de los principales servicios como suministro de agua potable, energía eléctrica en baja y media tensión, depuración, canalizaciones de telefonía, gas natural suministrado a alta presión y canalización de telecomunicaciones.

Otra parte clave para este desarrollo del polígono industrial de Villadangos del Páramo es la ejecución de un ramal ferroviario que conecte la línea León-La Coruña con el polígono, y que en palabras de Suárez-Quiñones supondrá «el nacimiento de un nuevo sector industrial en la provincia, como es el de la industria metálica pesada, que va a permitir crear una sinergia empresarial que supondrá no solo una sustitución a la deslocalización de Vestas, sino que va a mejorar y ampliar la potencia de empleo y la actividad económica que desarrollaba dicha empresa».

Barrera también confía, por su parte, en que sirva para que el polígono se convierta «en un polo no solo logístico, sino también metalúrgico» y, respecto a su avance, indica que es «lento por todos los trámites administrativos que hay que dar, pero se van cumpliendo más o menos los plazos previstos en cuanto a tiempos y ahora mismo el apeadero provisional ya está descargando bovinas para NSR, que es la planta que ha cogido el testigo de Vestas, y preveo que en septiembre estén ya sacando mercancía”. La Junta confirmó que el próximo 25 de agosto el consejero de Fomento y Medio Ambiente visitará el ramal del polígono en el momento en el que está prevista la llegada de un tren. «Se convertirá en una infraestructura que pone a la cabeza el polígono industrial de Villadangos» y que «avanza con la colaboración y el trabajo conjunto» del Gobierno de España, la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Villadangos del Páramo», remarcó Suárez-Quiñones.