La Guardia Civil desaloja una fiesta ilegal en un pueblo de Zamora

Los jóvenes se citaron en una zona de campo a las afueras del pueblo, donde algunos permanecían hasta que a última hora de la tarde de hoy han sido desalojados por la Guardia Civil por orden judicial, ha informado en un comunicado de audio el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco.

Blanco ha reprobado el comportamiento de los jóvenes que han organizado una quedada en el lugar mediante redes sociales y ha agradecido la colaboración de los vecinos del pueblo, que denunciaron lo ocurrido.

El subdelegado del Gobierno ha explicado en declaraciones a Efe que la Guardia Civil acudió al lugar tras recibir las llamadas de varios vecinos el viernes por la noche que alertaron de la concentración de jóvenes.

Por ello, la Guardia Civil estableció un dispositivo con la unidad de seguridad ciudadana y con agentes de Tráfico. De esta forma, se logró identificar a muchos de los participantes en la fiesta y se denunciaron algunos incumplimientos en el uso de mascarillas, respeto de la distancia de seguridad o tenencia de sustancias estupefacientes.

El dispositivo ha evitado además "el efecto llamada", ya que hizo que algunos jóvenes no llegaran a acudir al evento, otros se fueran por la presencia de los agentes y los que se quedaron "han sentido en todo momento el aliento de la Guardia Civil", ha declarado Ángel Blanco.

Tras el requerimiento de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León, como autoridad sanitaria competente, el Juzgado de Instrucción de Puebla de Sanabria autorizó a última hora de esta tarde el desalojo por motivos sanitarios de los jóvenes de la zona del campo en la que se habían dado cita en Vime de Sanabria.

En un comunicado, la Junta de Castilla y León ha explicado que estos hechos constituyen "infracciones muy graves", lo que permite la adopción de medidas cautelares como el desalojo, ya que existía un riesgo para la salud pública y había causado "alarma social en la comarca".

El desalojo de la treintena de personas que aún permanecían en el lugar se ha producido en "un tono pacífico", aunque los agentes permanecerán en la zona, ya que si alguien se niega al desalojo o vuelve al lugar podría incurrir en un caso de desobediencia, según ha explicado el subdelegado.