Financiación y despoblación, exigencias de Castilla y León en la Conferencia de Presidentes

Y es que, afirmó, «coincidimos en lo fundamental». Entre esos temas, el primero, apuntó De Santiago-Juárez, «revisar» el modelo de financiación autonómica. Recibir unos ingresos adecuados por esta vía, incidió, «es la única forma» de poder prestar unos servicios adecuados. El actual sistema, aprobado en 2009 bajo la presidencia del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, es insuficiente. En el debe de las entregas a cuenta «faltan entre 450 y 500 millones de euros» al año para sufragar únicamente los costes de los tres departamentos sociales (Sanidad, Educación y Servicios Sociales).

Así que abordar la reforma del modelo de financiación autonómica en la Conferencia de Presidentes es un tema que «sí o sí» exigirá Castilla y León que se incluya en el orden del día. Lo hará hoy, a través de su vicepresidente, en la reunión preparatoria. De Santiago-Juárez reconoció que «todos» los partidos están «de acuerdo» de que debe abordarse y se haga, además, teniendo en cuenta en el reparto las características que tiene la región como la dispersión, la extensión o el envejecimiento, que condicionan el coste de la prestación de servicios.

Junto a la financiación autonómica, otro punto de coincidencia es la necesidad de abordar «paralelamente» la local. Además, incidió De Santiago-Juárez, «involucrarnos todos» para «hacer frente» a los «desafíos demográficos» que padece España en general y de manera más acusada algunos territorios como Castilla y León.

Coincidencia en los temas desde la oposición, aunque con una visión más crítica sobre los resultados que pueda obtener. Desde el PSOE, su portavoz, Luis Tudanca, además de reclamar que se aborde la financiación de los servicios sociales y la «pendiente» local, reclamó que Herrera exija en esa Conferencia de Presidentes una «salvación» para la minería «antes de que no pueda llegar» porque desaparezca la actividad. Además, al igual que exigió a Herrera en el pleno de las Cortes, reclamó que exija al Gobierno la cofinanciación del sistema de dependencia, aportando al menos 150 millones de euros al año.

Y no sólo en el ámbito autonómico hizo sus reivindicaciones Tudanca, quien también exigió que Castilla y León tenga una «voz propia» en debates nacionales como la reforma constitucional o la cuestión territorial. «No puede ser que se oiga la voz» de otras autonomías como Andalucía y no ésta.

Algo escéptico, Tudanca deseó que «por fin sea útil el papel de Herrera» para los intereses de Castilla y León. En el mismo sentido, el portavoz de Podemos, Pablos Fernández, quien coincidió en los temas fundamentales mostró sus «serias dudas de que los castellano y leoneses saquen alguna ventaja» de la Conferencia de Presidentes.

Por su parte, Luis Fuentes (Ciudadanos) instó a que todos los presidentes autonómicos lleguen a un acuerdo sobre los servicios sociales a prestar y el coste en cada región «para ofrecer las prestaciones de forma igualitaria en todos los territorios».

Desde el Grupo Mixto, José Sarrión (IU-Equo) incidió en reclamar «la reivindicación de la deuda histórica de Castilla y León, que se ha dedicado muchos años a exportar mano de obra barata sin recibir contraprestación en forma de inversiones para su modelo productivo y crear empleo».

«Estamos de acuerdo en temas como la financiación autonómica o la despoblación como asuntos ya anunciados y que deben ser debatidos», coincidió el portavoz del Grupo Popular, Juan José Sanz Vitorio, en declaraciones recogidas por Ical.