«Está tres días sin meterse en el agua y ya me dice que se ahoga»
La medallista paralímpica Marta Fernández recibe el Premio Castilla y León del Deporte
La nadadora Marta Fernández Infante en uno de los podios de Tokio
La nadadora Marta Fernández Infante se vino de los Juegos Paralímpicos de Tokio con un triplete de medallas. Consiguió oro en los 50 braza SB3, plata con récord mundial en los 50 mariposa S5 y bronce en los 50 libres S5. Ante eso, el ... jurado no ha podido menos que reconocer su «brillante actuación» con el Premio Castilla y León del Deporte . Su madre, Anunciación Infante, cuenta que la joven se ha enterado de la feliz noticia al bajar de un avión que la traía de Berlín, antes de retirarse a descansar. «No se lo esperaba ni por asomo. Lo ha recibido con una alegría enorme y muchísimas llamadas», asegura.
Y es que para Fernández, los listones no son para llegar, son para colgar medallas . Su abuela ya le decía que aquél en el que empezó a guardarlas «se iba a caer del peso», y lo cierto es que ya tiene varios ‘listones’. Sólo de la competición en tierras alemanas se trae otras cuatro medallas: dos oros, una plata y un bronce. Además, vuelve premiada como la mejor nadadora de entre la competencia femenina y con dos récords mundiales, ya que «batió uno por la mañana y lo superó por la tarde».
La deportista, que trabaja como funcionaria en Valladolid, compatibiliza trabajo, entrenamientos en piscina, gimnasio y rehabilitación. De Tokio vino «agotada», cuenta su madre, pero tras recuperarse, el éxito no le ha hecho perder de vista sus objetivos. «En el agua es increíble, pero ella lo ve normal, es la misma mujer que hace dos años», declara Infante , que destaca su dedicación a los entrenamientos. «Está tres días sin meterse en el agua y ya me dice que se ahoga», ríe.
Ella, que tiene parálisis cerebral, soñaba con las pesadas medallas de los Juegos que ahora tiene en casa, asegura. Por eso, refleja, es para la nadadora tan importante dar testimonio de que los sueños y las metas se pueden cumplir, con o sin discapacidad. Un mensaje que quiere transmitir «sobre todo a los niños».
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